La formación política aragonesa más joven, Chunta Aragonesista (CHA), acaba de celebrar su séptima Asamblea Nacional (¿Congreso?). Como no podía ser de otro modo, se han felicitado por los excelentes resultados obtenidos en los diferentes comicios electorales, esos que les han permitido tener importante presencia en diferentes instancias (fundamentalmente el Ayuntamiento de Zaragoza), y han manifestado su intención de obtener un escaño más en el Parlamento de Madrid el 14-M. Si discutieron sobre su actual ausencia en el Gobierno de Aragón, en la mesa de las Cortes y similares (cuando la presencia en estas instancias debería ser prioritaria, dado el carácter nacionalista de la formación), nada se ha sabido. Sí que Labordeta obtuvo el primer puesto en el ranking de votos obtenidos para formar parte del comité nacional y Chesús Bernal el segundo. Bravo por ambos, aunque no me negarán que el tirón del polifacético cantautor justifica tal hecho: que el líder real del CHA es Chesús, aunque Bizén Fuster aparezca al frente de la misma (cuestiones internas de menor relevancia). Sí interesa resaltar el objetivo chuntero de convertirse en la tercera (pronto segunda) fuerza comarcal para reforzar la identidad aragonesista, de una parte, y para instalarse en posiciones de poder institucional, por otra. Van a ir a por todas, usando en este caso los instrumentos que su querido amigo José Angel Biel ha ido construyendo para controlar lo que ya nunca podrá. Generosos que son, al turolense le deparan una sorpresa agradabilísima, y a fuer de Dios que merecida.

*Profesor de Universidad