El Gobierno compra al PNV el apoyo a los Presupuestos por 472 millones» (Abc, 23-02-2010). «Zapatero compra al PNV 18 meses de poder debilitando más a España» (El Mundo, 16-10-2010). Estas son solo algunas de las bofetadas que se llevó el Ejecutivo socialista por pactar los presupuestos con los nacionalistas vascos. Por no hablar de las lindezas que le dedicaron periodistas como Alfonso Ussía. Sirva de ejemplo la que publicó en La Razón, (24-02-2010): «Los nacionalistas, da igual que sean catalanes, vascos o gallegos, no odian al Estado. El Estado es para ellos un chollo (…), la llave victimista que abre de par en par la puerta de sus despensas. Pero sí odian a España, la Patria común con un milenio de unidad a sus espaldas». Hay más ejemplos como estos, extraídos del libro Las mil frases más feroces de la derecha de la caverna (Aguilar), escrito por el colega José María Izquierdo, y que vale la pena releer porque ayuda a interpretar algunas de las cosas que están pasando seis años después. «La postura del PNV es un síntoma de que es posible el diálogo y la negociación en esta legislatura. No es cuestión de cobrar o premiar. Es cuestión de invertir de manera justa». La frase no es de un nacionalista vasco. La pronunció la dirigente del PP Andrea Levy hace 15 días. En una entrevista en RNE, ¡oh sorpresa!, contrapuso los «buenos dirigentes» del PNV al Gobierno de Puigdemont que, según ella, «no pelea por obtener unas ventajas ni unas mejores inversiones». Habrá que esperar a que se produzca el big bang otoñal para ver cómo actúan unos y otros. También el pragmático PNV y el nuevo PSOE. H *Periodista