Los madrileños han dado un paso al frente y ya están en la lista de salida para alcanzar la meta de ver convertida su ciudad en sede olímpica allá por el 2012, a pesar de que alguien tan ducho en estas lides, cual es el caso de Juan Antonio Samaranch, señalara que "Madrid no suena mucho en el extranjero". Han logrado su objetivo y con una puntuación extraordinaria, en la que el citado Samaranch ha tenido mucho que ver. Entre dos bucles, el Forum Barcelona 2004 y la hipotética Madrid Olímpica 2012, Zaragoza aspira a conseguir la nominación como sede de la Expo-2008. Ojalá alcancemos el objetivo, aunque cada día que pasa parece más alejado. Si Madrid apenas suena en el extranjero, ¿qué decir de Zaragoza? Si España inicia el siglo XXI con tanto evento internacional, ¿no les parece que alguien dirá basta ya? A todo ello, más allá de algún buen quehacer, y de la regalada temática del agua como elemento nucleador, cabe añadir la absoluta carencia de ideas e impulsos atractivos --por parte de quienes asumieron lo ajeno como propio-- para proyectar en el mundo a Zaragoza. Desearía equivocarme, pero no estaría de más empezar a pensar en otras cosas para celebrar el 2008.

*Profesor de Universidad