Al ministro Cristóbal Montoro le gustó ayer, más o menos porque hizo algunos retoques, el plan de ajuste de Aragón por el que la comunidad se va a ajustar 200 millones de euros más por haberse pasado en el déficit del año 2013. Lo presentó en el Consejo de Política Fiscal y Financiera el consejero de Hacienda, Javier Campoy, y poco más se sabe salvo que ya se ha ejecutado un 30% y que no va a afectar a los ciudadanos. ¿A quién pues?... ¿Tantos edificios más van a venderse? ¿Por qué si es tan bueno no se ha presentado en condiciones? Y además, si no afecta ni a la sanidad, ni a la educación, ni a los servicios sociales, ¿qué miedo hay en transmitirlo? Si el Gobierno de Luisa Fernanda Rudi quiere ofrecer tanta transparencia como dice, que empiece por lo importante que es esto. Si nuestro Gobierno ajusta, hay que saber cómo.