Tanto que criticó Jorge Azcón desde la oposición los nombramientos de ZeC en el Ayuntamiento de Zaragoza, que, según él, solo respondían a intereses partidistas o amistades personales, y ahora resulta que como alcalde hace lo propio. Coloca a dedo --como no paró de afirmar el popular en otros tiempos-- al frente del Patronato de las Artes Escénicas a José María Turmo, con escasa experiencia en el sector, y cuyo último cargo público fue con Rudi. Y a Rosa Plantagenet en Zaragoza Dinámica, que incluye el instituto de empleo, aunque conozca más la gerontología social que la formación para personas en riesgo de exclusión o en condiciones desfavorables. No son los mejores, sino los que tiene que colocar el PP.