El viento, aludes, inundaciones, incendios forestales, terremotos o accidentes de transportes con mercancías peligrosas son elementos potenciales de crear situaciones de riesgo a las que hay que hacer frente con planes de prevención. Su definición y localización más plausible en el territorio de la comunidad está recogida en el Plan Territorial de Protección Civil de Aragón, un documento presentado ayer y que actualiza el anterior de 1995. Solo con la creación desde entonces de nuevos entes administrativos como las comarcas y su encaje en la disponibilidad de recursos de respuesta o la puesta en funcionamiento de unidades de intervención como la UME ya estaría justificada su actualización. Pero hasta la propia normativa exige su puesta al día cada cuatro años. La prevención es garantía de una respuesta adecuada .