El Gobierno de Sánchez cumplió ayer con su anuncio y aprobó las primeras ayudas para la restauración de minas de Teruel y para un plan de eficiencia energética. Aunque a la oposición no le ha gustado que estas subvenciones se aprueben enmedio de la campaña electoral e incluso se preguntan de dónde sale el dinero si no hay presupuestos (hay una parte que vienen de fondos europeos), el decreto sienta las bases ante el futuro incierto de esta zona.