Noche a noche, Enrique Bunbury se reencuentra con su público zaragozano en el Principal, donde ha tenido que prorrogar el programa de actuaciones al agotarse las entradas nada más salir a la venta. El martes el teatro estaba a rebosar, y algunos fans del cantante que no habían conseguido entrada esperaban a la puerta del Principal por si algún arrepentido ofrecía la suya. Si hubieran visto los palcos reservados al ayuntamiento habrían lamentado su mala suerte, porque sólo el concejal del PP Pedro Jato, junto con su esposa, ocupaba dos butacas.