Los accidentes de tráfico son un temido lastre que acompaña especialmente en las fechas vacacionales. Sin embargo y, afortunadamente, en la primera parte de la Semana Santa (desde el pasado día 12 hasta la medianoche del lunes) en Aragón no se registró ninguna víctima mortal, aunque haya habido siniestros de distinta consideración. Y eso a pesar de tener una red de carreteras nacionales muy transitadas en los días de salidas y regresos masivos. Quizá la concienciación que suponen los operativos especiales consigue más atención de los conductores en estas jornadas, que se traducen en mayor prudencia, frente a la relajación que puede aparecer en los días que se consideran habituales. Que siga la prudencia.