Se cumple el 25 aniversario de la muerte de Salvador Dalí, lo que significa un mojón en la historia de España. Dalí es una estrella mundial. Es decir, TVE programó un extenso documental sobre su figura. Pero esperamos más, sin prisa, incluso abarcando todo un Año Dalí: la emisión de Un perro andaluz, en cualquier hueco, junto al repaso de algunas de las numerosas entrevistas que concedió, especialmente la que tuvo con el maestro Joaquín Soler Serrano (A fondo, 1977). El Dalí, que creó la expresión "putrefacto", sin duda inspirada en la muy aragonesa "carnuzo", escuchada a dos aragoneses como Pepín Bello y Luis Buñuel en la Residencia de Estudiantes, es uno de los valores de la Marca España. De los pocos valiosos que nos quedan.

Lo que no hemos perdido es esa esencia surrealista que el pintor elevó junto a Buñuel a la máxima categoría. Todo aquí es bastante absurdo. Nos topamos con la noticia del chanchullo del fichaje de Neymar y vemos que algunos periodistas no colaboran a sembrar sensatez; el subdirector de El Mundo Deportivo, Francesc Perearnau, en lo de Susanna Griso, además de no dejar hablar a nadie, sostiene que todo es un montaje "desde Madrid", y que estas cosas pasan en todos los clubes. ¿Este hombre es un periodista o un hooligan? ¿A ese punto tiene que llegar su pasión por el Barça? Alguien ha destapado el tapón del tonel del fútbol y va a comenzar a soltar mierda. ¿Cómo habrá sido el fichaje de Ronaldo y el de Bale, me pregunta alguien? No quiero ni pensarlo, me da miedo.