Al Qaeda ha recrudecido sus amenazas a España, y anticipado que desatará un infierno en nuestro territorio. Nuestro país nunca se había encontrado en una situación tan extrema, tan extraña, tan dramática.

La mayoría de los españoles siguen sin tener una idea clara de las razones que inspiran a esta multinacional islámica del terror. En qué fuentes ideológicas beben, cómo se financian, dónde ocultan sus campos de entrenamiento, cómo reclutan a los ejecutores de sus atentados, muchos de ellos suicidas potenciales, o cuál ha sido hasta ahora su modus operandi .

A propósito de éstas cuestiones, El Semanal ha entrevistado a uno de los, en teoría, mayores expertos mundiales en Al Qaeda: Rohan Gunaratna, un licenciado en relaciones internacionales de 42 años, budista, originario de Sri Lanka. El interés de Gunaratna hacia el fenómeno terrorista arranca de sus estudios sobre los Tigres Tamiles, la organización independentista del antiguo Ceilán. Hacia 1993 viajo a Pakistán, tras las huellas de Osama Bin Laden. Allí consiguió entrevistarse con unos doscientos integrantes de Al Qaeda, cuyas informaciones le sirvieron para hacerse una idea precisa del origen y alcance de la organización.

A preguntas de la entrevistadora, Judy Clarke, Gunaratna, hoy enrolado en la oficina de Prevención del Terrorismo de Naciones Unidas, intuyó que algo muy grave estaba a punto de suceder cuando los talibanes volaron las estatuas gigantes de Buda en Bamiyán, en marzo de 2001. El 11 de septiembre parecía impensable, pero sucedió y, a partir de entonces, este experto, que anticipó la reciente masacre de Madrid, ha analizado el comportamiento criminal de la banda. "Europa era un objetivo claro de Al Qaeda -advierte en la entrevista- y los países europeos han sido hasta ahora muy tolerantes con los grupos de apoyo, que sirven fundamentalmente para atentar".

En su libro, Inside Al Qaeda , Gunaratma explica que la organización fundamenta su operatividad en una estructura descentralizada y en el funcionamiento de dos tipos de células: logísticas y ejecutoras. "Las primeras distribuyen propaganda, reclutan, recaudan fondos y facilitan tecnología. Las ejecutoras, del tipo a la que pertenecía Mohamed Atta (11-S) actúan cuando el objetivo ha sido ya identificado. Hacen el reconocimiento final y ejecutan la operación... Ambos tipos de células están siempre activas. Cuando los sistemas de alerta de cada país se disparan, sólo permanecen las de apoyo".

Las finanzas de Al Qaeda beben de diversas fuentes. Bin Laden cuenta con el respaldo de algunos regímenes, y con negocios propios. En España, por ejemplo, asegura Gunaratma, los componentes de Al Qaeda se dedican a clonar tarjetas de crédito.

La organización extiende sus redes en diversos países y territorios: Argelia, Marruecos, Sáhara, Sudán, Egipto, Somalia, Arabia Saudí, Yemen, España, Francia (cuyos agentes han sido los únicos capaces de infiltrarse), Reino Unido, Bosnia, Alemania, Chechenia (de donde procede la guardia personal de Bin Laden), Pakistán, Afganistán, Malasia, Indonesia, Filipinas, Uzbekistán y Tayikistán. Un enemigo temible.

*Escritor y periodista