Cuando Fátima Báñez, ministra de Empleo, afirma que las cuentas de la Seguridad Social se equilibran gracias a los nuevos cotizantes, el personal se deshueva. Cuando el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, glosa la chapuza del 1-O, los policias, guardias y piolines en general despliegan sus pancartas reclamando un sueldo igual al de los mossos. Cuando el de Hacienda, Cristobal Montoro, lanza globos sonda, nadie se los toma en serio. Y al presidente de todos ellos, Mariano Rajoy, la preocupación le pinta en la cara un gesto de sorpresa, porque él siempre creyó que todo habría de cuadrarle por ser quien es: un conservador de toda la vida, provisto del sentido común de toda la vida, armado con argumentos de los de toda la vida y que solo aspira a que España sea... la de toda la vida. Claro.

Ciudadanos tira ya con bala. El PNV se hace el loco. El PP se queda solo con sus infumables leyes: la LOMCE, la de Seguridad Ciudadana... Albert Rivera ha dejado de considerarse el socio minoritario y exige, presiona y está cada vez mas borde. No te digo cuando se aproximen las elecciones pendientes, empezando por las andaluzas. En el Sur, Cs gana terreno. Daría lo mismo que presentase como candidato a la presidencia de la Junta al burrito Platero. Con subir a la tribuna de sus grandes mítines a Ines Arrimadas, ya tiene la mitad del trabajo hecho.

No es que las izquierdas estén para tirar cohetes. Es que la derecha, la de toda la vida (y perdonen que me repita), no tira ni petardos. Su clientela se ha envejecido (como la del PSOE, el otro partido tradicional), y justo en tan delicado momento se descubre que el sistema público de pensiones está quebrado. España se empobrece sin remedio, los sueldos caen en picado y la desigualdad crece como en ninguna otra parte de Europa. A eso Rajoy y los suyos lo llaman recuperación. Así que los abuelos salen a la calle cabreadísimos mientras los voceros del conservadurismo les conminan a que se conformen y hagan el favor de morirse pronto, que si se empeñan en vivir más allá de los ochenta...