Rajoy se organiza. O sea, la derecha se organiza. Después del revés sufrido en las elecciones generales, parecía que en las filas del PP, además de cundir el desánimo, había también un malestar de fondo, pero lo cierto es que el resultado electoral de las elecciones europeas ha insuflado los ánimos de los dirigentes populares. Dicen quienes están cerca de él que Mariano Rajoy está recuperando el tono político y que está dispuesto a ejercer con ganas el papel de jefe de la oposición. Es más, puestos a decir, a soñar o simplemente a analizar, en la sede del PP no descartan que dentro de cuatro años puedan recuperar el poder. Sí, así como suena.

Creen los prohombres populares que el Gobierno de Zapatero esta prendido con alfileres, que los ministros tienen poco fuelle, y que por más que Zapatero ahora tenga el viento a favor, cometerá errores que le pasarán facturas. Pero sobre todo explican, y se explican a sí mismos, cómo es posible que el PSOE haya pegado un bajón en las europeas, habiendo estado precedidas estas elecciones de una decisión como la de retirar las tropas españolas de Irak. Y así, haciendo este análisis, la plana mayor del PP se prepara para dar la batalla en esta legislatura recién comenzada. Rajoy está en todo, cuentan desde Génova 13, y quiere que el próximo otoño, cuando se celebre el Congreso del partido, éste se renueve, ofrecer otro look más centrista. De ahí su invitación a Ruiz-Gallardón para que haga el discurso inaugural del Congreso del PP, de ahí también que se vaya filtrando que don Mariano contará con la gente más políticamente correcta de la que milita en filas populares. Al PP el resultado de las europeas le ha dado una buena dosis de ánimo y eso se nota hasta en los pasillos del Congreso, donde los populares ya no lucen rostros cariacontecidos como en semanas pasadas. Eso sí, en voz baja se comenta que Rajoy quiere un equipo a su imagen y semejanza y que eso significa desaznarizar el PP. Y en eso está a la chita callando.

*Periodista