Es verdad que hay caras nuevas en los órganos rectores del PSOE aragonés después del congreso regional celebrado el fin de semana en Zaragoza. Es cierto que la media de edad de la ejecutiva regional ha bajado. Pero a partir de ahora los socialistas aragoneses deben externalizar esa renovación que se ha fabricado desde la continuidad del mismo líder, Javier Lambán, y con los hilos que mueve un histórico como el oscense Miguel Gracia. Ahora hay que ver si al nuevo secretario de organización, Darío Villagrasa, le dejan hacer y si los nuevos aires se traducen en las instituciones,