La mayoría de los expertos parecen estar de acuerdo en que la próxima Revolución Industrial tendrá mucho que ver con la Inteligencia Artificial (IA).

Poco a poco, de manera irreversible, los ordenadores y robots irán asumiendo trabajos y recursos hasta ahora reservados exclusivamente a los seres humanos. Avances tecnológicos que afectarán a todos los órdenes de nuestra actividad, desde los trámites financieros con empresas o bancos a las más variadas tareas domésticas, sin olvidar el tráfico en las grandes ciudades o los nuevos sistemas de transporte, como el vehículo sin conductor o la cápsula de movilidad rápida terrestre.

Las nuevas energías no contaminantes, o menos contaminadoras, reemplazarán a las clásicas, de las que sólo parece vaya a resistir la electricidad.

Como consecuencia de la mecanización y automatización de sectores completos, y tan complejos como el sanitario, o la educación, los cambios afectarán a profesiones generales (médicos, docentes...), incidiendo drásticamente en los mercados laborales.

El nuevo trabajador deberá incluir en su formación nociones avanzadas de Inteligencia Artificial y una mayor empatía para evitar que las próximas aplicaciones informáticas y el proceso de robotización altere las relaciones humanas en las que se vea diariamente implicado, tanto en el trabajo como en su universo familiar. Asimismo, el conjunto de novedades irá también modificando la geografía empresarial, industrial, arquitectónica, vecinal y anímica de las sociedades avanzadas, que siguen avanzando, en efecto, y hacia nuevos modelos universales, es verdad, pero sin que se pueda adivinar hoy si todo eso será para beneficio propio o un semillero de males ajenos....

Todas estas cuestiones y muchas más están científicamente abordadas en Inteligencia artificial. 101 cosas que tienes que saber sobre nuestro futuro (editorial Alienta) de Lasse Rouhiainen. Un autor experto en nuevas tecnologías, videomárketing, márketing digital e inteligencia artificial.

Una excelente introducción sobre las implicaciones y consecuencias que nos deparará, mañana y pasado mañana, la IA.