Los médicos especialistas, en huelga desde el pasado tres de febrero, han radicalizado aún más su postura en vista de que la DGA da largas a sus reivindicaciones. De los tres días de paros semanales que vienen manteniendo pueden pasar a hacer huelga todos los días de forma indefinida si antes del 22 de marzo no han sido atendidas sus demandas. Hasta ahora, ambas partes se han mostrado incapaces de alcanzar una salida negociada para evitar más graves perjuicios a los miles de pacientes cuyas consultas e intervenciones quirúrgicas han sido aplazadas. Si unos y otros no lo remedian, el colapso en la sanidad aragonesa será muy lamentable.