Cuando se cumplen los seis primeros meses de su llegada a la presidencia del gobierno de la Nación, Rodríguez Zapatero hace unas amplias declaraciones repasando las viejas promesas y sus cumplimientos y compromisos. Zapatero aparece relajado y satisfecho, y ciertamente poco conforme con el Rajoy que reiteradamente le ha reprochado que no tenga una cabal y completa idea de la España que quiere construir durante su mandato. Zapatero resume su actuación en media docena de palabras, nada más, o como él dice, en seis ideas que condenan las señas de identidad del proyecto que representamos: Paz, Europa, mujer, ciudadanía, solidaridad y seguridad.

No faltan referencias al Plan Ibarretxe . Zapatero muestra su confianza en lo que determinen los ciudadanos vascos en las próximas elecciones: lo importante será lo que digan los vascos. Otra gran esperanza del presidente está puesta en la conferencia de los presidentes autonómicos, y en el que pretende plantear tres cuestiones de trascendencia: participación de las CC.AA en Europa, financiación autonómica y en particular de la sanidad, y recuperación del debate anual sobre autonomías en el Senado.

*Periodista