La Semana Santa pega fuerte en Aragón. Los hoteleros prevén que los días del puente haya hasta un 80% de ocupación hotelera, más que el año pasado y, por supuesto, el Bajo Aragón turolense tiene ya buenas demandas. El alto impacto económico de estos días debe ser un aliciente para seguir impulsando esta tradición religiosa, un gran foco cultural y turístico, que debe ser cuidado por todas las instituciones involucradas. Así se hace también territorio.