Las declaraciones del secretario general de Política de Defensa, Javier Jiménez Ugarte, sobre el accidente del Yak42 evidencian, una vez más, que lejos de estar en la senda de la claridad, los interrogantes sobre la tragedia se agolpan. La transparencia en el caso a la que hace alusión el secretario de Política de Defensa en la entrevista con este periódico no ha sido precisamente lo que más están valorando las familias de las víctimas. Causa hilaridad que sean precisamente los familiares los que con su solo empuje y en unas condiciones difíciles mantengan en soledad el pulso para exigir justicia. Defensa reconoce ahora que se pudieron mejorar "algunas cosas" en relación con los vuelos. Y, tras la denuncia publicada en EL PERIODICO DE ARAGON, el Ministerio va a solicitar que se investigue el posible sobrepeso en el avión. Pero Trillo sigue lento y con el paso cambiado. Y el desvío de las culpas a la OTAN no le exonera de responsabilidad.