Apple ha presentado su tienda de discos en España. Vende sin parar. Su maquineta de reproducir música en formato comprimido (mp3), el iPod, ya le hace ganar más dinero que los legendarios ordenadores Macintosh. El buscador Google, que salió a bolsa en agosto sin respetar las tradiciones, dispara su cotización. Ha sacado un programilla que te lo bajas y busca dentro de tu ordenador. El siguiente paso será buscar dentro del cerebro (cada uno en el suyo y un troyano en cada casa). Por saltar a la vida exterior: rebuscar en los containers es ya una profesión, un oficio. Ya no se tira nada impunemente, todo tiene una segunda oportunidad, se va a imponer la trituradora en la oficina doméstica: cada vez quedan menos casas no oficinadas. Por volver a la música, el negocio se va por un lado y aparece por el otro. Y además: tampoco se va por el uno. Todo convive. Hasta vuelve el vinilo, a ratos. Saldrá el vinilo digital para nostálgicos, aguja laser. El mantero y la disquera. En Lo mejor de Rolling Stone (Ediciones B) hay un trozo de artículo de Tom Wolfe sobre una convención de disqueros (discográficas) en el 69: ese negocio. La presentación de Arén (Huesca) ha salido hasta en el Interviu: tablet PC para los niños de las escuelas, conectados día y noche sin cables. Esta iniciativa del pupitre digital para los niños rurales la inventó el maestro de Ariño (Teruel), José Antonio Blesa, en febrero del año pasado (en educa.aragob.es hay mucho material). El navegador Mozilla, heredero del Netscape destronado por el Explorer de Microsoft, ya se he hecho un hueco en los discos duros del mundo. Los internautas han hecho una colecta y han sacado lo suficiente como para poner un anuncio de página en el New York Times , aunque el auténtico marketing ha sido la propia colecta: esto desemboca en que la red y sus iniciativas realimentan al papel, al menos al NYT. La red: lo mismo que sirve para bajarse canciones gratis sirve para comprarlas. El Barclays va a abrir un centro para sus servicios digitales en Zgz, aunque se pierde el nombre Zaragozano . Dos caras: tecnopuestos de trabajo, nombre al olvido. Mientras llega la Milla Digital el barrio de San José estrena el sábado su Palmo Digital (ensanjosé.net), similar al Milímetro de almozara.org, que imparte nuevos cursos con soft libre. Maria José Hernández canta mañana (ella misma, no en mp3) en San José: la asociación de vecinos cumple 30 años.

*Escritor y periodista