Un problema menos. Y no precisamente en un ámbito tranquilo. El sector de la Educación en Aragón ha resuelto con eficacia el habitual embrollo anual de los niños que se quedan sin plaza en la escuela concertada al acceder de Infantil a Primaria, viéndose obligados a seguir sus estudios en otro centro. Sin esperar a septiembre, desde la consejería de Eva Almunia se ha diseñado una solución, ampliando el número de plazas en algunas escuelas para que este año 26 niños no tengan que cambiar de colegio. Sólo ocho alumnos, pertenecientes a las Escuelas Pías no podrán seguir en el centro, pero tan siquiera pertenecían a esta zona.
