Un muerto por semana es el triste balance de la siniestralidad laboral en lo que va de año en Aragón. El goteo no se interrumpe, y ayer, un joven trabajador murió aplastado por una pared de hormigón armado que se desprendió de una grúa en una empresa de Tauste. El sindicato CCOO ha sido tajante en su denuncia: "El accidente se podría haber evitado de haber existido medidas de seguridad". Suceso tras suceso van quedando en evidencia las precarias condiciones en las que se trabaja en algunas empresas, y suceso tras suceso los sindicatos vuelven a exigir la depuración de responsabilidades en aquellas en las que existe un descuido generalizado. De los 14 accidentes registrados en la comunidad en lo que va de año, este es el cuarto que se produce por un aplastamiento al fallar el mecanismo de pesos, de lo que se deduce que la inspección debe actuar, pero debe hacerlo también de forma preventiva para hacer cumplir la ley antes de que sea tarde.