La llegada de Víctor Muñoz como nuevo entrenador del Real Zaragoza se pulió en la noche del martes. El nuevo míster acudió a un restaurante de la capital para entrevistarse con los directivos del club y no le sentó nada bien descubrir que le estaban esperando los fotógrafos. Reacio a la exposición pública más allá de las obligaciones del cargo debió considerar que ese aún no era el momento. Queda mucha Liga para practicar la transparencia.