Uno de los efectos que ha tenido la crisis ha sido el desplome del precio de la vivienda. Caídas que en algunos casos superan el 50% tanto de las casas nuevas como las de segunda mano. Tal es así, que las Vivienda de Protección Oficial (VPO), únicos pisos a los que podían acceder miles de ciudadanos por tener unos precios ajustados con unas calidades muy aceptables, se encuentran actualmente igualados en el precio. Con una desventaja, que los de VPO se encuentran en barrios alejados o con déficit de servicios en muchas ocasiones.