Leo en Leonoticias una que me deja estupefacto: la última encuesta de afinidad de voto realizada en León capital depara una amplia victoria al partido de Santiago Abascal, Vox.

La muestra ha sido realizada recientemente sobre un espectro de tres mil consultas telefónicas a ciudadanos residentes en la capital leonesa. El 33% de los mismos manifestaron su simpatía hacia la formación de ultraderecha. En segunda posición quedó el Partido Socialista, con un 20%. Le seguía el Partido Popular, con un 15%, y Ciudadanos con un 10%. Según este sondeo, el próximo alcalde leonés será de Vox.

Debe precisarse que las encuestas de afinidad no son tan creíbles como las de intención de voto, puesto que simplemente acuñan una tendencia, la manifestación genérica de una simpatía política que podría o no materializarse en el voto, en las urnas, pero, desde luego, son orientativas. (Aunque en este caso produzcan desorientación, al difuminar el paisaje electoral con la niebla de lo desconocido).

Voces del PP me aseguran que un sorpasso de Vox a sus siglas no es posible, ni en León ni, por ejemplo, en Zaragoza capital. Sin embargo, las encuestas vienen advirtiendo que Vox crece, y que lo hace con rapidez.

Votarán a Abascal, por supuesto, todos los franquistas, que aún son muchos. Le apoyarán muchas personas de la tercera edad, por lo general más fácilmente manipulables, y muchos jóvenes, el voto yogurín, seducidos por el radicalismo de un nacionalismo español que apela a las raíces del tradicional autoritarismo centralista, a la ley y al orden, a esa España una, grande, pero sólo libre hasta donde lo autorice el reglamento.

Votarán a Vox muchos anticatalanistas y antiautonomistas, que igualmente crecen ante el pasmo de los políticos centristas, constitucionalistas y defensores del Estado de las Autonomías. Votarán a Abascal los taurinos, los antiabortistas y quienes condenan el matrimonio homosexual.

Y, lo más peligroso, le empujarán muchos insatisfechos con el actual sistema, frustrados y parados. Aquéllos cuyas expectativas no han sido cubiertas por el período de la Transición.

Peligro.