El Zaragoza de Víctor Muñoz volvió a sumar ayer tres puntos que le permite afrontar el partido del jueves frente al Barcelona, en el Camp Nou, con renovadas confianzas. El encuentro con el Albacete fue todo un festival goleador en el que los aficionados disfrutaron del espectáculo y salieron satisfechos con el resultado, que mantiene a los zaragocistas en los puestos de cabeza de la Liga en la tercera jornada. El fútbol vivido ayer en La Romareda no tiene nada que ver con el sufrido la semana pasada frente al Sigma checo en el estreno en la Copa de la UEFA y que dejó un desagradable sabor de boca a todos los que vieron el encuentro.

El de ayer, sin embargo, significó el reencuentro con la eficacia rematadora que tanto se echaba de menos y la aparición en escena de Javi Moreno y Villa, que marcaron frente a un Albacete muy atrevido que pagó sus pecados defensivos. También sirvió para ver de nuevo a un Zapater enorme.