Los avances tecnológicos y la investigación en nuevas terapias celulares, como las realizadas por CRES PhisiUp, encabezadas por el Dr. Pedro Lapuente están dando resultado. La artrosis es la principal causa de discapacidad en el mundo y, en concreto en España, cuesta al año casi 5.000 millones en gastos globales a la Sanidad. Teniendo en cuenta que ya afecta a más del 50% de la población igual o mayor a 50 años, en este caso las cifras se disparan.

Los problemas articulares afectan tanto a hombres y mujeres, a deportistas y a personas que han sufrido algún tipo de lesión. Las articulaciones con un mayor índice de dolencia suelen ser las de rodilla, seguidas por cadera y codo.

El doctor Lapuente explica que “la artrosis y otras dolencias articulares pueden ser tratadas actualmente con células madre y otros grupos celulares que se encuentran en los propios tejidos del organismo, como pueden ser la grasa. Y pueden implantarse en la zona deteriorada. Todos los pacientes sometidos a esta técnica de tratamiento, como por ejemplo en el caso de la rodilla, mejoran el movimiento articular y se disminuye en más del 75% el dolor”.

El doctor Pedro Lapuente, director de I+D+i de Grupo CRES.

Estas terapias celulares forman parte de la denominada Medicina Regenerativa, y su aplicación en las lesiones favorece la vascularización y recuperación de la zona dañada, dando lugar a la desaparición del dolor y a la mejoría en el movimiento.

Uno de los médicos expertos que forman el equipo del doctor Lapuente es el Dr. Luis de Yavorsky, quien afirma que “dichos tratamientos no son sólo útiles en patologías de desgaste articular debido a la edad, como en el caso de artrosis, sino que también es muy beneficiosa en el tratamiento de lesiones agudas producidas por la práctica de deporte como tendinitis, lesiones de menisco, ruptura de fibras, etc.”

El doctor Luis De Yavorsky, médico experto del equipo del doctor Lapuente.

TÉCNICA SENCILLA Y SEGURA

Si hablamos de la técnica, asegura que se trata de un procedimiento muy simple, realizado mediante microcirugía, bajo anestesia local y sin necesidad alguna de hospitalización: “El paciente entra y sale por su propio pie. Prácticamente carece de riesgos y conseguimos en muy poco tiempo disminuir drásticamente el dolor que sufre el paciente, mejorando la movilidad articular y, sobre todo, si se realiza a tiempo, puede llegar a mejorar la evolución degenerativa de la articulación, que sin duda obligaría a una intervención de prótesis en el futuro en el caso de artrosis articular o a complicaciones más graves en otro tipo de lesiones”.

A lo que el doctor Lapuente añade que “no solo consiste en reducir el dolor que el paciente padece en el momento que viene a nuestra consulta sino en evitar el deterioro y las complicaciones en la función articular que vendrán posteriormente de no hacer el tratamiento adecuado”.