España es un país envejecido. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE) publicadas en el 2018, en la primera mitad de este año solo hubo 179.794 nacimientos en España, la cifra más baja para un primer semestre desde que empezó a funcionar el INE en 1941 y un 5,8% menos que el mismo periodo del 2017. Lo que significa que la sociedad española es más anciana que joven.

Aún así, las tasas de mortalidad también están aumentando en los últimos años, por lo que hay que buscar un remedio para frenarlas. Ya que contamos con pocos recién nacidos en nuestro país, ¿porqué no cuidar a los más mayores?

El cuidado de ancianos es hoy en día más necesario que nunca. Ellos son las personas que cuentan con más experiencia, más momentos vividos y más años de trabajo a sus espaldas. Por ello, se les deben proporcionar las mejores atenciones y cuidados.

Para ello existen las residencias de ancianos, lugares donde los mayores están atendidos las 24 horas del día, rodeados de profesionales como trabajadores sociales, terapeutas, médicos, psicólogos, enfermeros, etc. Además, conviven con gente de su edad, para que así el ambiente sea más cómodo para ellos.

Existen situaciones en las que las familias ya no pueden hacerse cargo de las personas mayores que estén manteniendo en sus viviendas o simplemente estas personas se sienten solas y no saben cómo ocupar su día a día. La mejor opción para estas es trasladarlas a una residencia, o si no son dependientes, a un centro de día donde podrán realizar infinidad de actividades y talleres mientras conocen a gente de su edad.

Por otro lado, muchas empresas ofrecen servicios de asistencia a domicilio Conscientes de las esmeradas atenciones que deben recibir los mayores, ofrecen diferentes soluciones para las familias que no pueden compatibilizar el cuidado de sus mayores con las tareas diarias. Además, muchas empresas hacen uso de una metodología moderna para abordar todas las cuestiones relacionadas con la asistencia domiciliaria a ancianos y discapacitados, así como con la asistencia hospitalaria en residencias de ancianos.

Además, muchas organizaciones ofrecen un servicio de teleasistencia durante todo el día los 365 días al año, en la que simplemente con pulsar un botón, los mayores recibirán la asistencia a domicilio (http://www.cuidadomayoressevilla.es/ ) que necesiten.

PLENA DISPOSICIÓN

Cercanía, cariño y dedicación. Estos son algunas de las cosas que más necesitan las personas de la tercera edad. En residencias o centros de días los profesionales cualificados no dudan en proporcionarles todo ello más otros múltiples servicios.

En el caso de que los ancianos padezcan alguna enfermedad, tomen medicación, o deban controlar su tensión, cuentan con personal sanitario cualificado para ello, con un servicio médico y de enfermería durante todo el año.

Las tareas de higiene y aseo son fundamentales en el cuidado del mayor, por ello, también hay asistentes especializados que conocen todas las técnicas y maniobras para realizar estas tareas de forma rápida y sin molestias.

Por otro lado, las personas mayores tienen la oportunidad de acceder a peluquería personal, tratamientos estéticos, manicura y podología, clases de natación terapéutica, etc., ya que deben sentirse bien consigo mismos y conservar el ánimo y la autoestima.

Como bien dice el refrán, “prevenir es mejor que curar”. Por eso mismo, en muchas residencias se establecen controles de constantes a las personas mayores, como modo de prevención y seguimiento de patologías previas. Igualmente, los cuidadores se encargan de que la persona esté en todo momento en la mejor postura posible y que esta vaya cambiando periódicamente para evitar molestias o complicaciones como consecuencia de la inmovilidad.

Estos y otros muchos servicios son ofrecidos en residencias o centros de día con la finalidad de que los mayores sigan desarrollando sus capacidades, se mantengan activos y vivan felices.