Una reforma en nuestra vivienda es un gran cambio, que aunque positivo, muchas veces tememos debido al desconocimiento acerca de los futuros resultados.

Para evitar sorpresas desagradables, es necesario acudir a buenos profesionales del sector, con referencias. En Zaragoza, disponemos de algunas empresas como reformas zaragoza jrc, especializada en la rehabilitación de espacios y obras, tanto integrales, como específicas para baños y cocinas. Puedes consultar su página https://reformaszaragozajrc.com/reformas-cocinas-zaragoza/ para obtener más información al respecto.

Antes de empezar, debemos pensar bien en qué necesitamos y cuál es el presupuesto del que disponemos para hacer los cambios que deseamos.

Por ello, es buena idea hacer un listado por categorías de todo lo que se pretende guardar en una habitación, y el espacio aproximado que implica; contando también con algo de almacenamiento extra, por si nuestras necesidades al respecto varían en el futuro. Del mismo modo, hay que pensar también en cualquier otro tipo de mobiliario que se vaya a necesitar, sin olvidarse de garantizar zonas de paso que sean suficientemente anchas y libres de obstáculos. Una planificación adecuada es esencial, y puede ahorrarnos muchos dolores de cabeza.

A menudo nos resultará excesivamente complejo evaluar nuestras posibilidades por nosotros mismos. Así que es recomendable contar con el asesoramiento de expertos en arquitectura e interiorismo, que cuentan con la formación y experiencia adecuada para determinar la mejor distribución del espacio y las modificaciones necesarias para ello, ajustándose a las posibilidades de cada cliente. Por tanto, mantenerse receptivo a sus sugerencias es la mejor actitud que se puede tomar al respecto. Así mismo, los buenos profesionales deben ofrecer presupuestos y propuestas de proyectos realistas. La sinceridad es también una garantía de que los resultados estarán a la altura de lo convenido.

CONTRATOS DE OBRA, SEGUROS Y PERMISOS

Los contratos de obra deben incluir un seguro de responsabilidad civil y garantías que nos protejan, en caso de que se produzca algún problema durante y después de la reforma.

Conseguir los permisos de obra necesarios suele ser un trámite relativamente sencillo. No obstante, normalmente no tendremos que preocuparnos por ello, ya que es común que sea la propia empresa la que se encargue de solicitarlos.

Algo común, también, es que sean ellos quienes se encarguen de informar y conseguir el permiso de la comunidad de vecinos, si este es necesario.

REFORMAR UN BAÑO

Estas son algunas de las preguntas que debemos hacernos a la hora de rehabilitar un cuarto de baño.

¿Hay otro cuarto de baño en la vivienda?

Disponer de otra estancia con idéntica función, supone un mayor margen de decisión a la hora de hacer cambios. ¿Cuál de los dos es más grande? ¿Cuántas personas harán uso diario de él? ¿Es necesario tener bañera en ambos?

Puede que en muchas ocasiones nos demos cuenta de que ciertas necesidades ya están cubiertas. O, por el contrario, que sería conveniente añadir algo más al baño que vamos a reformar para compensar las carencias del otro.

¿Qué dimensiones tiene?

Si es muy pequeño, posiblemente debamos prescindir de algún elemento para garantizar la funcionalidad del espacio. El tamaño también influirá en la elección de los colores, al igual que la disponibilidad o no de luz natural, algo que es común que falte en muchos baños. Para compensar este punto, es conveniente jugar también con las fuentes de iluminación y la colocación de espejos y mamparas, de tal manera que aumenten y no entorpezcan la sensación de amplitud que se pretende conseguir, para sacar el mayor partido del espacio disponible.

¿Se puede cambiar la distribución de sus elementos para que esta sea más eficiente?

Es necesario que si pretendemos hacer un cambio de este tipo consultemos a un profesional. La ubicación de las bajantes y ciertos elementos de fontanería dificultan o imposibilitan algunas opciones.

CAMBIAR LA COCINA

La reforma de cocinas es uno de los servicios más demandados actualmente. Esto se debe a que las necesidades relativas a ella han cambiado de forma acelerada en los últimos años, debido a que ahora disponemos de muchos electrodomésticos que hace unas décadas no eran de uso común o sus dimensiones eran menores. También han cambiado nuestros gustos en cuestión de estética y preferimos materiales nuevos que favorezcan la asepsia, algo de importancia capital en este tipo de estancias.

Pese a que siempre es importante atender a la distribución adecuada, en las cocinas esto toma mayor importancia. Una buena planificación no solo implica más comodidad a la hora de cocinar o limpiar, si no que disminuye el riesgo de accidentes domésticos, muy comunes cuando manejamos objetos punzantes, como cuchillos; fuentes de calor o líquidos y sólidos a altas temperaturas. En la misma línea, se encuentra la necesidad de garantizar una correcta ventilación a través de la campana extractora, respiraderos y ventanas cuya apertura no esté comprometida por armarios u otro tipo de mobiliario.