Ya salió en su defensa justo después de la derrota del pasado sábado en Soria y, ayer, Alberto Zapater volvió a sacar el escudo para proteger a su técnico, al que el club destituirá en caso de que el partido del domingo ante el Tenerife se salde con un resultado distinto a la victoria. El capitán, en todo caso, fue algo menos contundente de lo que había sido tras caer frente al Numancia, si bien insistió en que su pensamiento no había variado desde entonces. «Lo veo -a Idiakez- una persona muy tranquila que sabe que está ante una gran oportunidad y seguro de que va a sacar esto», expuso el ejeano para referirse a la delicada situación en que se encuentra el preparador vasco y a su capacidad para revertir la situación. «Quizá le sorprende todo este ruido alrededor, pero, como le digo a mis compañeros, cuando uno viene aquí hay que intentar aislarse y focalizar todo en el césped y el trabajo. No creo en otra cosa que en esto. Pero es lo que tiene llevar esta camiseta y lo que representamos».
Zapater fue uno de los principales protagonistas de las reuniones que mantuvo, el pasado domingo, el director deportivo, Lalo Arantegui, con la plantilla, a la que expuso la gravedad de la situación, a solo dos puntos del descenso, a diez de los dos primeros y con apenas dos sumados de los últimos quince. «Pero reuniones tenemos siempre, también cuando ganamos. Lo malo sería no hablar porque a lo que aspiramos todos es a sacar los partidos de esta semana y cambiar esto. Todos queremos estabilidad y que todo vaya bien y creo que es lo que va a pasar. Si es así, ya no habrá este pesimismo que, por otra parte, es normal porque todos creíamos que íbamos a estar más arriba y mejor».
Porque, para el ejeano, uno de los principales peligros que amenazan ahora es que el zaragocismo pierda toda la ilusión que había depositado en el equipo, como lo demuestran los más de 27.000 abonados, los recibimientos al equipo, las grandes entradas en La Romareda o el estado de optimismo y confianza que se había instalado en la afición a raíz de la pasada campaña. «Tenemos que hacer que esa ilusión siga viva en todo el mundo. No queremos que se pierda porque sabemos lo importante que es y lo que la necesitamos», apuntó el capitán.
El mal momento actual también es una contundente sorpresa para la plantilla. «Todos esperábamos estar arriba desde el principio, a pesar de que sabemos que es difícil», admitió Zapater, que no quiere escudarse en la gran cantidad de lesiones sufridas por jugadores importantes desde que comenzó la pretemporada ni en las últimas decisiones arbitrales que han perjudicado a los aragoneses. «Hay que hacer autocrítica y cada uno tenemos que mejorar para cambiar esta sirtuación ganando partidos. No hace mucho del partido ante el Oviedo, cuando todo era maravilloso, y eso no pasó porque sí. Está en nuestra mano. Todos sabemos la responsabilidad que tenemos», aseveró.
LA COPA
Y el capitán apuesta por romper la dinámica mañana ante el Cádiz. La victoria no taponaria la sangría provocada por los malos resultados en Liga, pero, en opinión del canterano, ayudaría mucho a hacerlo cuatro días después ante el Tenerife. «Tenemos que ganar al Cádiz, Es una buena oportunidad porque esa victoria nos acercaría más a ganar el domingo», aseguró Zapater, que tiene claro que solo hay un camino para poner fin a la actual tendencia. «Cuando se pierde únicamente se puede cambiar la dinámica ganando y no lo hemos hecho. Por eso, creo que el partido ante el Cádiz es importantísimo».
La galopante depresión del Zaragoza, incluso, ha relegado a un plano muy secundario una efemérides para la historia. En Soria, Zapater disputó su partido 300 con el club aragonés, una cifra que solo han alcanzado quince jugadores a lo largo de la historia de la entidad. «Los cambiaba por haber ganado el otro día. Sabía la importancia que tenía ese partido, así que ahora mismo me importa más bien poco haber cumplido esos 300 partidos. Esto va semana a semana y lo que quiero es jugar el siguiente encuentro, pero, por encima de todo eso, lo único que me importa es que esto vaya bien y ganemos», aseveró el centrocampista zaragozano.
