No queda otra que levantarse, dejar de mirar atrás y no desviarse de la senda trazada a partir de la llegada de Víctor Fernández. De nada sirve recordar y lamentar las heridas provocadas por la inmerecida derrota ante el Málaga, un rival mayor que debió salir entregado de La Romareda, pero que ganó por una simple cuestión de eficacia. Tampoco sirve ya señalar a Marc Gual y recriminarle su aciaga tarde de cara al gol ante los andaluces. Ni llorar la baja de Javi Ros, al que una entrada salvaje dejará al conjunto aragonés varias semanas sin su jugador más regular hasta ahora. Todo eso es pasado ya. Y las urgencias del Zaragoza le obligan a mirar siempre hacia adelante.

Así que el partido de esta tarde ante el Rayo Majadahonda se erige en una reválida para una escuadra que se enfrenta a la necesidad de mantener el rumbo y la identidad adquirida a partir de la llegada del nuevo técnico. La cuestión es si la derrota ante el Málaga ha creado dudas o ha dañado la autoestima. No debería. El camino es el correcto y el Zaragoza, pese a las bajas, sabe, al fin, quién es y qué quiere.

Pero no lo tendrá fácil en el Cerro del Espino. Y eso que el cuadro madrileño aún no ha ganado en la segunda vuelta. Tampoco conoce la victoria como local desde que abandonó el Wanda Metropolitano para jugar en su casa, a la que parece no haberle tomado las medidas todavía. Es el Rayo, en todo caso, un enemigo de cuidado, creado en base al estilo propio de un entrenador de raza, Antonio Iriondo, y que mira al oponente siempre a los ojos, sin bajar un ápice la cabeza. Un tipo serio.

El duelo entre dos rivales directos -quién lo hubiera dicho hace cuatro meses- en la lucha por la permanencia medirá la envergadura de un Zaragoza que acude a la cita con numerosos efectivos lejos de su mejor versión. Es el caso de Papu, que apenas ha entrenado un par de veces esta semana, y Álvaro Vázquez, recuperado de su segunda rotura de fibras de la temporada pero falto de ritmo. Ninguno de ellos será titular. No estará Ros, aunque el navarro pregona a los cuatro vientos que la fractura de peroné no le dejará muchos partidos fuera. Así, la medular, en la que tampoco estará Guti, se presenta como la zona más problemática del equipo.

EL CAPITÁN

Todo apunta a que Zapater volverá a ser titular tras dos semanas en el banquillo. Tal vez lo haga junto a James en una línea de cuatro justo por delante de Eguaras y en la que, además, también formarían Pombo en la izquierda para explotar sus diagonales hacia adentro. Similar cometido tendría Soro desde la derecha. El canterano cuenta con muchas opciones de debutar como titular fuera de casa esta campaña. Sería su segunda aparición en el once inicial después de haberlo hecho en la décima jornada ante el Tenerife en La Romareda. La alternativa es Aguirre, pero su profundidad y desborde lo abocarían a la izquierda, lo que trasladaría a Pombo a la derecha, una parcela en la que Víctor no contempla al zaragozano.

Arriba seguirá Gual, para el que el partido es algo más. El catalán acabó desolado ante el Málaga tras haber errado tres claras ocasiones de gol, lo que acabó resultando determinante para la suerte del choque. Seguirá como referencia ofensiva del equipo, entre otras cosas, porque tampoco hay más remedio. Álvaro aún no está para ser titular y el resto de delanteros de la primera plantilla o no están -Toquero lleva lesionado toda la temporada y todo apunta a que anunciará en breve su retirada- o no se les espera -Medina y Raí tienen las horas contadas en el club, aunque el brasileño no tiene intención alguna de moverse-.

Aunque la presencia de Gual también responde a una moción de confianza. Víctor valora mucho el trabajo de un delantero esforzado, generoso y solidario. Hace muchas cosas bien el catalán, pero apenas ha sido capaz de marcar dos goles en toda la primera vuelta. La cifra, tan raquítica como desalentadora, preside cualquier debate en torno a un futbolista cuya titularidad también se pone en juego esta tarde. La posible llegada de Linares, la mejoría de Álvaro y una Romareda de uñas amenazan seriamente esa condición de cara a la próxima contienda si la eficacia de Gual no mejora.

No habrá cambios en retaguardia. Seguirán los mismos que jugaron frente al Málaga, con la urgente necesidad de acabar con despistes y desajustes como los que provocaron el primer tanto ante los andaluces. También para Lasure, Muñoz y Guitián, que cometió una falta innecesaria previa al primer tanto y que pudo haber sido expulsado después, el duelo de esta tarde es una reválida. Junto a ellos aparecerán Benito en el lateral derecho y Cristian bajo palos.

En el Rayo vuelve el defensa Rafa López, por lo que los únicos ausentes, además del lesionado Carlitos, serán Francisco Varela, el ex del Huesca Morillas y el uruguayo Schiappacasse, con su selección. Tampoco estará Toni Martínez, autor del primer gol del club en Segunda. Fue en La Romareda.