El Zaragoza juega esta noche (20.00 horas) en La Condomina ante el UCAM Murcia para iniciar la segunda vuelta y en un duelo en el que solo la victoria le servirá para calmar el temporal que se desató tras la derrota en Tenerife y en medio de un am- biente de cambios en la plantilla, de una revolución que aumenta a cada paso que los resultados no llegan y evidencian la necesidad de transformar la plantilla si se quiere mirar de nuevo al ascenso, casi imposible por la vía directa por la lejanía de 12 puntos ya, y a cuatro del tren de la promoción. El Zaragoza, en un estado claro de urgencias, necesita vencer en un campo donde preocupa el es- tado del césped en una semana donde nevó primero en Murcia y después han acompañado las lluvias. Ayer la climatología ya hizo que el equipo llegara con mucho retraso a su destino.

El 2017 no ha sentado bien al Zaragoza ni a Raúl Agné. Al parón llegó el equipo con dos triunfos, algo afortunados, ante Oviedo y Rayo, pero la derrota ante el Girona ya fue un golpe y caer, por la forma de perder, en un partido muy triste, en Tenerife hizo saltar las alarmas. La crisis, y no es la primera de una temporada gris, es un hecho y el crédito de Agné no está ni mucho menos intacto. Otra cosa es el margen del club para plantearse medidas drásticas en un futuro que en teoría aún no parece cercano. Esa disponibilidad económica permitida por la Liga, tras el despido en su día de Luis Milla, es muy estrecha.

CON CANI y SIN LANZA

Para alejar dudas y fantasmas, para traer calma en una situación donde se mezclan los nervios por la mala clasificación y la decepción por una temporada que apunta en los presagios a no traer de nuevo la meta del necesario ascenso a Primera, es vital ganar al UCAM, el peor local de la categoría, con solo 10 puntos y dos victorias en 11 partidos de local, un recién ascendido en este curso y en zona de descenso en estos momentos. Las debilidades del rival convierten en más obligatoria la victoria si cabe y, en consecuencia, traerarán un vaparalo mayor si el Zaragoza regresa sin ese botín de la vieja Condomina.

Recupera Agné para la cita a Cani tras cumplir su sanción, pero no contará con el último en llegar, Edu Bedia, ya que no viajó tras ser fichado el jueves. No están José Enrique y Fran, tampoco Lanzarote, de irregular aportación en el equipo, en este caso por sus molestias y un plan específico, ni los jugadores que están a punto de salir, el primero de ellos Juan Muñoz, de inminente fichaje por el Levante. Es esperable que Agné dote de más fútbol al equipo, algo que no hizo en Tenerife, con ese doble pivote entre Valentín y Zapater, pero el técnico ha escondido celosamente su once. Ni siquiera desveló la vuelta de Irureta, en la puerta de salida también pero al que el técnico ha preferido por delante de Ratón en las últimas semanas. Solo la gripe le dejó fuera de jugar en el Heliodoro al vasco, aunque Agné esta vez no quiso aventurar- se tanto como la semana pasada y no hablar de piernas rotas. Salvo sorpresa, Irureta jugará. También apunta a volver Javi Ros a la medular y Edu García podría aprovechar las molestias de Xumetra o el bajón de nivel de Xiscu para ser titular en un once donde el regreso de Cani dejaría fuera a Dongou. Mientras, los últimos errores de Cabrera o el bajo nivel de Casado para que el uruguayo pase al lateral podrían hacer hueco a Valentín en el eje.

El Zaragoza solo ganó un partido fuera de casa en la Liga, en Vallecas, y es un visitante paupérrimo, pero necesita cambiar esa dinámica en este comienzo de la segunda vuelta. 21 jornadas y 63 puntos dan para mucho, pero el equipo de Agné necesita adquirir regularidad y fútbol, aunque sobre todo debe cerrar la sangría defensiva, ya que esos 30 goles son una losa pesadísima. En el estreno liguero, el Zaragoza fue muy superior al UCAM en una victoria que disparó la euforia.

EL UCAM, EN APUROS

Casi 5 meses después, el equipo zaragocista no confirmó las sensaciones del debut, pero sí lo hizo el UCAM, que entonces ya tenía toda la pinta de pelear por no bajar. Ya vivió un cambio de entrenador, con la llegada de Francisco por Salmerón. No reacciona el UCAM, que no conoce la victoria con su nuevo míster. Es un bloque aguerrido e intenso, pero sin mucha calidad que suma cinco partidos y casi dos meses sin ganar. Es un rival propicio con los números en la mano. Un enemigo que esconde el peligro de aumentar las urgencias del Zaragoza.