Entre las fórmulas que estudia el Real Zaragoza para compensar a los abonados la imposibilidad de acudir a La Romareda a presenciar los seis encuentros disputados a puerta cerrada tras la pandemia no figura la devolución íntegra del importe correspondiente. La entidad apela al maltrecho estado de sus arcas para asegurar que la adopción de esta medida sería letal para su tesorería, que no podría soportarla. El club continúa revisando posibles vías de compensación al abonado, pero la devolución total por los seis partidos jugados sin público está descartada.

En todo caso, la decisión definitiva se desde el Consejo de Administración, que es quien debe dar el visto bueno a la propuesta procedente del departamento comercial y de márketing del Real Zaragoza. Esta pretenderá mantener ese "vínculo emocional» con el abonado, que, de acuerdo a la situación actual de la pandemia en España, parece abocado a seguir sin acceso a los estadios al menos hasta el 2021.

Las cuentas del club, pues, presiden cualquier decisión. No hay un plazo determinado para adoptarla, como tampoco se ha fijado una fecha fija para llevar a cabo la campaña de abonados para la temporada 2020-21. La prórroga a la prohibición de que el público entre a los campos de fútbol suprime cualquier necesidad urgente de acometer la campaña. Si no se puede entrar a La Romareda no se precisa el carné de abonado y, además, para el resto de gestiones continúa habilitado el de la pasada campaña.

La actual situación también provoca que el Real Zaragoza haya decidido ya no dar nuevas altas en lo que a abonados se refiere. Un aforo demasiado alto en la actualidad y la inviabilidad, al menos a corto y medio plazo, de que entren todos al estadio, invita a adoptar esta medida.

De momento, y a falta de actividad en el terreno de juego, la tienda oficial ha convertido en el centro neurálgico del zaragocismo. La presentación y puesta a la venta, la pasada semana, de la camiseta correspondiente a la primera equipación del equipo aragonés de la próxima temporada ha sido bien acogida por la afición. El ritmo de venta es bueno, aunque sin alcanzar el de la pasada temporada.

La diferencia reside en el periodo diferente en que ambas presentaciones se llevaron a cabo. Mientras que el pasado ejercicio se realizó a comienzos del verano, como es habitual, las actuales circunstancias lo han demorado todo. Tanto el final de la anterior temporada, como el inicio de la pretemporada y de la próxima campaña y, consecuentemente, también las cuestiones asociadas a ello como la presentación de la campaña de abonados o las nuevas camisetas.

De hecho, el Real Zaragoza todavía no ha desvelado cómo será la segunda equipación, aunque fuentes del club aseguran que, si bien la primera fue algo más clásica que la de las anteriores temporadas, la segunda indumentaria será «más rompedora».

Por su parte, el Real Zaragoza mantiene su intención de presentar una elástica conmemorativa del 25 aniversario de la consecución de la Recopa del Europa en París ante el Arsenal. La iniciativa, frenada también por la pandemia, se retomará próximamente con la intención de sacarla a la venta, aunque no existe una fecha estimada para ello.