El Real Zaragoza celebra el martes, a las 10.00 horas en el salón de Plenos de la Cámara de Comercio, la primera Junta General de Accionistas desde que César Alierta pasó a tener la mayoría del capital social mediante la capitalización de deuda por valor de 1,86 millones en un movimiento aprobado a finales de julio.

En la Junta, el club presentará, de la mano del director financiero de la entidad, Mariano Aured, unas cuentas que arrojan superávit por quinto año consecutivo. En esta ocasión, el beneficio, antes de impuestos, es de 1,287 millones de euros, lo que deja la deuda neta a 30 de junio del 2019 en torno a los 80 millones de euros, de los que 19,1 corresponden a deudas con la Fundación Zaragoza 2032, máximo accionista del club.

El superávit es ligeramente superior al de la campaña anterior (1,707 millones) y el club maneja una previsión en el actual ejercicio de 6,5 millones como consecuencia, sobre todo, de la venta de jugadores durante el pasado verano. En este apartado se incluyen las de Pep Biel al Copenhague por una cantidad de hasta 4,5 millones, la de Soro al Real Madrid por algo más de 2,5, la de Verdasca al Beitar de Israel por 400.0000 euros o la de Mateo Mejía al Manchester United por alrededor de 150.000. Así, la entidad presenta una previsión de ingresos de 5,6 millones de euros de beneficios procedentes de traspasos de futbolistas.

Para la plantilla, el límite salarial fijado por LaLiga para esta campaña es de 7,5 millones de euros, mientras que las cuentas también reflejan el presupuesto para la actual temporada, que se sitúa en 15,7 millones, con una disminución del ingreso televisivo a 7,3, como consecuencia de la peor clasificación del Real Zaragoza la pasada campaña, en la que acabó en decimoquinta posición tras una nefasta campaña en la que cambió dos veces de entrenador. Por su parte, los abonos permanecen en cifras similares, con alrededor de 4,3 millones.