El Real Zaragoza sigue muy atento a lo que suceda con el Reus en los próximos días. El conjunto aragonés tiene muy encaminada la llegada de Miguel Linares, delantero natural de Fuentes de Ebro y que ya vistió la camiseta del filial en Segunda B en sus inicios, aunque nunca llegó a jugar con el primer equipo. Eso sí, antes deberá desbloquearse la delicada situación institucional que atraviesa el cuadro tarracorrense, que está al borde de la desaparición.

De momento, el equipo catalán sí que jugará el partido ante el Córdoba de este sábado, que estaba en serio riesgo de suspensión. El motivo que es que la RFEF no autorizó la solicitud de la Liga, que pedía que no se jugase. Se prevé un lleno en el Estadi Municipal ya que podría ser el último encuentro oficial del Reus en Segunda como mínimo, ya que también puede desaparecer la entidad por completo o que se mantengan las categorías inferiores.

Para bien o para mal la solución debe llegar, como tarde, el martes. Es la fecha límite. Los jugadores podían denunciar ante la AFE los impagos del club taraconense una vez se acumulasen tres meses y, dicha denuncia ya está formulada, por lo que el Reus tiene cinco días hábiles para abonar las nóminas. Dicho plazo se termina el martes, porque los jugadores no han querido aceptar el pago que les garantizaba la Liga.

La deuda es de 5 millones de euros y Joan Oliver, el máximo accionista, no va a pagar. Por lo tanto, la única vía pasa por una venta contrarreloj. Se habló del interés de un grupo inversor de Dubai pero, oficialmente, el Reus no tiene ningún comprador que haya salido a la luz pública.

Eso sí, emerge la figura de Jorge Mendes. El representante, uno de los hombres más influyentes del mundo del fútbol, fue uno de los primeros nombres en salir a la luz y podría volver a estar interesado en la adquisición del club catalán. De todos modos en Reus se muestran cautos y, de momento, solamente es un rumor.

Mientras la solución trata de llegar, los jugadores se están planteando diferentes opciones. Si el club acaba desapareciendo, todos quedarán libres y podrán firmar por cualquier club, aunque no podrán debutar hasta el 1 de enero, fecha en la que se abre el mercado invernal. En caso de que la entidad siga adelante y llegue una nueva propiedad, no descartan en el club que varios futbolistas pidan igualmente la rescisión de su contrato, ya que las condiciones, en muchos casos, mejoran lo que tienen firmado con el Reus.

Este podría ser el caso también de Linares, que está ante la oportunidad de vestir de la camiseta del Real Zaragoza y, además, estar al lado de casa. El equipo aragonés le espera, pero antes debe solucionarse la complicada situación que vive el Reus. Antes del martes terminará el culebrón.