El Real Zaragoza completó ayer la tercera sesión de preparación de la era de Natxo González. Poco tiempo ha tenido que transcurrir para que se empiecen a esbozar sobre el verde de la Ciudad Deportiva las primeras señas de identidad del vitoriano, pero también se pudo ver la naturaleza de Borja Iglesias. El delantero cedido por el Celta lleva poco más de 48 horas en su nuevo club, pero se le observan detalles.

El primero de ellos, casualidad o no, fue a su llegada al hotel tras el largo camino desde Galicia. El delantero posó con una bufanda del Real Zaragoza y llevaba una camiseta con un león estampado. Eso por no hablar de la sorpresa que Kase. O le dio durante su presentación. Ayer, el punta realizó su segunda sesión y estuvo sonriente y hablador.

Con el primero con el que charló fue con Álvaro Ratón. No en vano, ambos tienen la misma edad, son gallegos y les une una amistad desde que eran pequeños. Al término también estiró junto a Zalaya, con el que compartió unas palabras. Sin embargo, el mayor detalle lo tuvo con Raí. Antes de correr en la última parte del entrenamiento, los jugadores se cambiaron de botas para estar más cómodos. Todos se apelotonaron en la valla, de pie. Todos menos uno: Raí.

El brasileño se sentó y Borja Iglesias le acompañó, le hizo un gesto cariñoso y charlaron. Los dos son, a día de hoy y a falta de un fichaje más, los delanteros en nómina para el curso que viene, los hombres que más deben besar las redes de la portería contraria y los encargados de continuar la estela dejada por otros nombres como Borja Bastón, Willian José o Ángel Rodríguez. Borja quiso conocer y saber un poco más de su nuevo compañero de viaje. Los dos son nóveles en Segunda, si salvamos los minutos disputados por Raí el curso pasado, y ambos quieren entenderse desde el primer minuto.

En cuanto al resto del entrenamiento, fue de intensidad gradual y no estuvieron Zapater, Buff, Grippo, Oyarzun y Alberto Benito al someterse a las pertinentes pruebas médicas de cada comienzo de pretemporada, así como Fran Rodríguez, Ortí y Lanzarote, cuyas salidas del club están cerca de resolverse. Los jugadores disponibles trabajaron un circuito físico, rondos y la presión defensiva antes de hacer carrera continua.