Al Zaragoza se le van acumulando las maldiciones conforme prolonga su andadura por una Segunda División de la que ya se ha convertido en todo un clásico. Una de ellas le lleva hasta Cádiz, tierra que no ha sido capaz de conquistar desde que bajó por última vez a los infiernos. De hecho, nunca ha ganado en Segunda en el Ramón de Carranza, donde no ha sido capaz de marcar un solo tanto desde hace 14 años. En las dos últimas campañas, el Cádiz ganó siempre con un autoridad casi insultante -2-0 la pasada campaña y 3-0 la anterior-.

Cádiz, pues, es territorio maldito para un Zaragoza que, además, nunca ha salido victorioso frente a un rival andaluz en toda la temporada. Hasta ahora, el cuadro aragonés se ha medido siete veces a un adversario de aquella comunidad autónoma y ha sufrido seis derrotas y un solo empate frente al Córdoba en La Romareda (0-0). En Almería (2-1) y Granada (1-0), el Zaragoza claudicó. Y también lo hizo como local frente al Granada (0-2), Cádiz (0-1), Málaga (0-2) y Almería (1-2). El mal fario también alcanzó a la Copa del Rey, en la que el Cádiz también derrotó al Zaragoza (0-1) en la tercera ronda del torneo disputada en La Romareda.

UN AÑO MALDITO // Está siendo, parece claro, una temporada maldita. O una maldita temporada. La fortuna también está dando la espalda a los blanquillos en lo que a acierto rematador se refiere. En las tres últimas salidas, el Zaragoza no ha sido capaz de perforar el marco contrario. No lo hizo en Pamplona ante Osasuna (1-0), ni en Granada (1-0) ni en Palma de Mallorca (3-0). La inoperancia ofensiva ha llevado a Víctor Fernández a idear nuevas fórmulas para poner en práctica mañana en Cádiz en busca de dar «dos pasos más» como visitante. En todo caso, el Zaragoza sigue estando entre los equipos más realizadores a domicilio. Solo Granada y Albacete, que han marcado 19 tantos, han sido más certeros que un equipo aragonés que acumula 18, aunque casi la mitad de ellos los anotó en solo dos encuentros -cuatro en Oviedo y tres en Tarragona ante el Nástic-.

Esta mala dinámica como visitante, con tres derrotas consecutivas, provocan que se haya igualado la peor racha a domicilio desde el último descenso. Solo una vez se habían encadenado tantos tropiezos. Fue en la temporada 2015-16, cuando el Zaragoza, entonces entrenado por Lluís Carreras, cayó de forma consecutiva en los feudos del Nástic (3-1), Oviedo (1-0) y Almería (2-1) aunque allí acabó la mala racha, ya que en el siguiente desplazamiento, a Córdoba, el Zaragoza logró la victoria (2-0). De este modo, si el equipo de Víctor Fernández pierde mañana en el Ramón de Carranza, encadenará, por primera vez desde el último descenso, cuatro derrotas seguidas fuera de casa. Otra maldición.

Ante todo ello, el Zaragoza, que vuelve a estar a cuatro puntos del descenso tras la victoria, ayer, del Extremadura ante el Almería, se conjura. Eso, al menos, aseguró ayer el capitán, Alberto Zapater, que aseguró que el equipo irá a Cádiz «a ganar» y acabar así con todas las maldiciones. «Vamos con la ambición y la ilusión de que, si hacemos las cosas bien, podemos ganar el partido. Venimos de ganar y el triunfo sería muy importante para nosotros», expuso el ejeano, que admitió que la empresa estará envuelta en dificultades. «Es un campo difícil pero nuestra idea tiene que ser que podemos ganar al Cádiz y a cualquier equipo; esa debe ser la mentalidad de aquí hasta que acabe la temporada. Es lo que exige este escudo, esta camiseta y este club».

El Cádiz solo ha perdido un partido en casa, donde está completando una gran campaña a pesar de que los dos últimos resultados no han sido tan positivos. En todo caso, Zapater no pierde la fe. «Queremos salvarnos cuanto antes. Creo que en esta categoría es posible que el Extremadura gane tres partidos seguidos así que sería un error pensar que estamos salvados», subrayó.

Para el capitán, el Cádiz «lo lleva haciendo bien desde hace varios años y, si sigue así, algún año ascenderá». El Zaragoza, por su parte, tratará de seguir escapando de un peligro que aún acecha. Otra vez a cuatro puntos. «Hay que sumar», insitió el centrocampista aragonés.