El Real Zaragoza regresó esta mañana a los entrenamientos tras el triunfo ante el Rayo Vallecano y antes de comenzar la sesión Víctor estuvo hablando con Kagawa y James, que fueron bajas el sábado contra el conjunto madrileño y que este domingo trabajaron al margen en el gimnasio, sin estar con los suplentes y descartados en ese partido. Ambos informaron al técnico del estado de sus sobrecargas en el aductor y, en principio, la idea es que el martes (10.30 horas, Ciudad Deportiva) tras el día de descanso que tiene la plantilla este lunes se incorporen al grupo y puedan estar disponibles ante el Girona el sábado en La Romareda (21.00 horas), ya que en ningún caso son dolencias importantes.

Mientras, Cristian Álvarez está en la recta final de su lesión en el isquiotibial que sufrió ante Las Palmas el 3 de noviembre, aunque seguro que no llegará ante el Girona y podría hacerlo ante el Deportivo. El portero argentino sufrió una rotura de fibras de grado II en el isquiotibial de la pierna derecha y está intentado acelerar su vuelta con un tratamiento en una cámara hiperbárica. Son bajas seguras también este sábado Atienza, Zapater y Vigaray. El central sufrió a finales de octubre, el día 30 en concreto en un entrenamiento, un esguince de rodilla y aún le quedan unas dos semanas para volver, mientras que Vigaray se lesionó ante el Albacete hace una semana con su tercera rotura de fibras seguida en el isquiotibial derecho y se va a ir con precaución con él. Así, aunque la rotura del lateral madrileño es leve, es posible que no juegue hasta el primer partido del 2020. Zapater, operado en la rodilla, es baja hasta marzo.