La buena trayectoria del Real Zaragoza provoca que no se vaya a correr riesgo alguno con su regreso. Ambos progresan muy satisfactoriamente en la recuperación de sus respectivas roturas musculares y evolucionan según los plazos previstos, pero la dinámica del equipo lleva a no precipitar en modo alguno su regreso a los terrenos de juego.
Así, tal y como apuntó Víctor Fernández en su última rueda de prensa, todo apunta a que tanto Cristian como Vigaray no volverán a jugar hasta el 2020 aunque, en caso de ser necesarios, Víctor podría recurrir a ambos antes de esa fecha. Pero si no surge una emergencia o una necesidad urgente en forma de lesión o expulsión de Ratón o Delmás, se seguirá apelando a la prudencia y su reaparición no se producirá hasta la entrada del nuevo año.
El regreso que está absolutamente descartado antes del 2020 es el de Atienza, que sufrió un esguince de rodilla a finales de octubre y que le mantendrá de baja un periodo algo superior a los dos meses.
Por fortuna, la ausencia de tres importantes efectivos en la retaguardia no está siendo acusada por un Zaragoza que ha rendido a un notable nivel en los últimos encuentros. Desde que Vigaray sufrió la tercera rotura de fibras de la temporada en el duelo ante el Albacete, el Zaragoza no ha vuelto a perder y ha sumado dos victorias (en Vallecas y Riazor) y un empate en casa ante un Girona que fue inferior a los aragoneses.
Sin Cristian, lesionado durante la segunda parte del encuentro frente a Las Palmas, el Zaragoza solo ha perdido un partido (ante el Albacete en el último instante tras haber malogrado numerosas ocasiones), ha empatado dos (en Almería y con el Girona) y ha ganado en Vallecas y Riazor.
Tanto Delmás como Ratón están rindiendo a un buen nivel, al igual que Grippo, Clemente y Guitián. Por eso, no hay necesidad de precipitar su reaparición y la recuperación de las lesiones se puede afrontar con mayor tranquilidad y cautela.
