Chechu Dorado, que se convertirá en las próximas horas en nuevo jugador del Real Zaragoza para lo que resta de temporada, renovará automáticamente su contrato por un año más en caso de que dispute 13 partidos de aquí al final de la campaña. En principio, esa cláusula de renovación había establecido un mínimo de 15 encuentros como condición indispensable para prolongar el vínculo contractual entre el club y el jugador, de 36 años.

Así lo exigió desde el principio la dirección deportiva de la entidad aragonesa a pesar de que la cifra se consideraba excesiva por parte del futbolista que, finalmente, accedió. Sin embargo, la demora en la cristalización de un fichaje que todavía no es oficial porque el presidente del Rayo Vallecano aún no ha estampado su firma en el finiquito del central, ha llevado a los rectores zaragocistas a rebajar esa cantidad límite de partidos necesarios para que Dorado, que ya se encuentra en Zaragoza a la espera de poder ser presentado, prolongue su estancia en el club.