Avanzaba la sesión matinal en La Romareda por la hora de trabajo cuando Eguaras dio el susto de la jornada. El centrocampista notó, tras un mal gesto, una molestia en el muslo izquierdo, en la zona cercana al aductor, intentó seguir y Natxo le invitó a que abandonara el trabajo por precaución, para evitar una lesión mayor. Desde el club se dejó claro que la molestia no revestía gravedad y Eguaras ya se ejercitó con normalidad por la tarde, por lo que su presencia el sábado ante el Barça B parece segura. El jugador navarro se ha hecho un fijo para Natxo en los últimos dos meses después de tener un comienzo de Liga más irregular.

Así, Eguaras dio el susto en la enfermería zaragocista ayer, en la que siguen Mikel González y Borja Iglesias, los dos con la rotura fibrilar, en la musculatura isquiotibial y en el aductor respectivamente, que sufrieron ante el Valladolid. Al ariete, salvo sorpresa, se le espera ante el Tenerife y Mikel apunta a tardar algo más en su vuelta. También es baja Raí, convaleciente de su operación de apendicitis.

LASURE, RECUPERADO / Mientras, Pep Biel siguió trabajando con el primer equipo en la jornada de ayer y el meta del filial Sergio García, Paisa, solo lo hizo en la sesión matutina. Por su parte, Lasure, que el martes no se entrenó por una gastroenteritis, lo hizo al margen del grupo en el comienzo del entrenamiento matinal, pero después ya se incorporó con absoluta normalidad al trabajo del equipo, lo mismo que por la tarde.

El Zaragoza, tras la doble sesión de ayer, tendrá un entrenamiento esta mañana a las 11.00 horas en la Ciudad Deportiva y ultimará su preparación para el duelo del sábado ante el Barcelona B (20.30 horas), teniendo en cuenta que a Natxo González aún le restarán la sesión matutina del viernes y la de activación del mismo sábado.