Guti se ejercitó este viernes de nuevo al margen, a las órdenes de Andrés Ubieto, preparador físico, cuando sus compañeros finalizaron su sesión en La Romareda. El canterano lleva una semana trabajando fuera del grupo, esperando un traspaso que estuvo a punto de ser al Almería pero que él decanto hacia Elche por su deseo de jugar en Primera. Todas las partes, desde el entorno del jugador y del club alicantino, aseguran que el acuerdo para que juegue en el conjunto ilicitano está muy próximo, pero finalmente no se cerró, aunque la sensación total es de que lo hará.

Fuentes cercanas a la negociación aseguran que esta se encuentra ya en los últimos detalles y que el fijo de la misma van a ser los 4 millones, medio millón menos que la propuesta del Almería, mientras que los incentivos, que en el caso del club almeriense podían suponer hasta 1,5 aquí serán menores, aunque también las habrá por partidos y si el Elche sigue la siguiente temporada en la élite. Además, el Zaragoza se guardaría un porcentaje del pase para la plusvalía de un futuro traspaso.

El salario que el Almería ofrecía al jugador, de unos 700.000 euros y con un contrato por cinco años, era mayor que la oferta que supone para el futbolista el Elche, por cuatro cursos, pero este ha preferido la posibilidad de jugar en la élite y no tener que enfrentarse en la categoría de plata con el Zaragoza.

El Almería, desde el jueves, ya da por perdido al futbolista y está centrándose en otras operaciones cuando el fichaje lo tenía cerrado en la práctica solo hace unos días, con el jugador esperando para viajar a la concentración en Marbella. Sin embargo, el Elche subió el miércoles su oferta, que era inicialmente de 3,5 millones y el deseo de Guti hizo el resto para que Christian Bragarnik, nuevo propietario del Elche, tomara personalmente las riendas de la negociación que está a punto de cerrarse. En cuanto lo haga, Guti viajará a la ciudad alicantina para formalizar su nuevo contrato.