—Rayo y Zaragoza son dos de los equipos más en forma. ¿Cómo se ve el partido en Vallecas?

—Será muy difícil, el más complicado de los que nos quedan. Es como una final, jugamos en casa, tenemos que enganchar varias victorias seguidas y nosotros, el Zaragoza y el Sporting somos los equipos que mejor racha llevamos. Están muy fuertes, pero intentaremos pararles.

—¿Qué supondría ganar?

—Alejarnos a nueve puntos de ellos, deshacernos de su competencia para subir directos, por así decirlo, y cortarles la racha. El Sporting juega en Valladolid, que es un campo difícil y tenemos la opción de quedarnos líderes en solitario sin ganamos. Además, si queremos acabar entre los dos primeros, en Vallecas tenemos que ganar todos los partidos.

—¿Son favoritos para subir?

—No. Es verdad que nos vemos como un gran equipo con una muy buena dinámica. Los propios rivales creo que nos ven más favoritos que nosotros mismos.

—Tras bajar de Primera, la temporada pasada en Segunda fue muy dura para el Rayo. ¿Qué ha cambiado en esta?

—Varias cosas. Estuvimos luchando por no bajar a Segunda B, con muchos problemas, aunque acabamos bien la Liga cuando llegó Míchel. Quizá esa es la tecla más decisiva, porque desde que llegó él cambió todo. Hubo dos entrenadores antes la temporada pasada y, hasta que no vino, el equipo no arrancó. Esta temporada ha formado el grupo según su criterio y su forma de jugar y los resultados están ahí. El buen ambiente y la dinámica dejan claro que la temporada es muy diferente.

—Para usted también, lleva 7 goles y 10 asistencias. Es uno de los más decisivos en Segunda.

—Me estoy encontrando muy a gusto. Empecé fuerte y no he bajado, estoy jugando todos los minutos, dando goles y asistencias y haciendo números buenos. Creo que esto era necesario para mí, que el trabajo se viera reflejado en esos datos. Ojalá mantenga la línea para ayudar hasta el final.

—Tiene casi 26 años. ¿Esta es la temporada de su explosión?

—Sí, sin duda, porque es cuando más me está luciendo todo. Otros años también jugué a buen nivel, pero la influencia en lo decisivo, en los goles y en las asistencias, me hace estar muy contento.

—No fue fácil su llegada al fútbol profesional.

—Nada fácil. Di muchas vueltas en varios equipos, por Madrid sobre todo. Estuve cuatro años en la cantera del Madrid, hasta cadetes, después en el Alcalá, el Leganés y llegué al Getafe en juveniles. Más tarde, estuve en dos clubs más de Tercera (Marchamalo y Carabanchel) hasta llegar al Rayo B, donde ni debuté, ya lo hice en el primer equipo y en Primera División.

—Todo se valora más así, ¿no?

—Por supuesto. Ese trabajo y ese sacrificio te hacen ser más consciente de lo logrado y de dónde estás. Recuerdo que mi madre me llevaba a entrenar durante muchos años y cómo estaba siempre ahí, a mi lado. Por ella también es un orgullo verme aquí, más cuando vives momentos en que te planteas si vas a llegar, que ves que es muy difícil jugar en Primera y ser profesional. No desistí nunca y, si hay trabajo, el que la sigue, la consigue.

—¿El Rayo tiene el mejor ataque de Segunda?

—Bueno, lo que más nos satisface es que somos uno de los equipos que más gusta ver de la categoría, que más propone juego, con posesión y llegada. Creo que esa es la base de nuestros triunfos.

—También está viviendo un año muy bueno De Tomás. 19 goles no son pocos.

—La está rompiendo, sobre todo en los goles. Nos da muchísimo con esos tantos en momentos decisivos. Ojalá mantenga el nivel tan alto hasta final de temporada. Le necesitamos.

—¿Qué le gusta más del rival?

—Que tiene muy claro su ideario. Es fuerte atrás y arriba tiene potencial. Aprovecha bien las contras y los errores del rival. Son difíciles de ganar, más con su dinámica y la confianza que llevan.

—No va a hablar de Borja...

—No hay más que ver los goles para saber que le está dando la vida al Zaragoza, pero no es solo los que marca es también cómo se queda los balones y los aguanta, cómo pelea y se asocia. Es un delantero muy completo.

—¿Cuál es la clave del partido?

—Espero que no sea como en la primera vuelta, donde tenemos la espina clavada porque fue injusto que se llevaran los tres puntos. En este partido, en Vallecas, con nuestra gente, que aprieta mucho, nosotros intentaremos salir como contra el Huesca, que lo hicimos como motos. A ver si podemos sentenciarlo en la primera parte y en la segunda no sufrir, pero no será fácil.

—¿Hace quiniela del ascenso?

—Subimos nosotros y el Sporting, que está muy fuerte. Ya en el playoff no me la juego tanto, aunque creo que el Zaragoza con la línea que lleva estará.