Tanto Ángelo Henríquez como Roger vieron la quinta amarilla en Montilivi y son baja ante Las Palmas porque deben cumplir un partido de castigo por amonestaciones. Como no hay más nueves en la primera plantilla, las opciones pasan por reubicar ahí a un jugador, con las posibilidades de Luis García, que lo fue en alguna ocasión en su carrera, o Javi Álamo, que jugó ahí en un partido de Copa ante el Sevilla con Jiménez, o apostar por uno de los arietes del filial, o bien Esnáider o bien Diego Suárez. Ahora mismo, es Esnáider el candidato porque parece que Víctor se inclina más por la alternativa del B.

Víctor comenzó contando más con Diego Suárez, al que le dio toda la segunda parte frente al Deportivo y los últimos minutos contra el Alavés. Ahí, estaba de baja Esnáider por una lesión muscular. Cuando el hijo del mítico ariete zaragocista se recuperó, tuvo minutos ante el Eibar (5) y el Jaén (9) y Suárez pasó a segundo plano. Contra el Numancia viajó Suárez, pero no Esnáider, y a Gerona, en el último partido, no fue ninguno.

Esnáider parece estar antes en las preferencias del técnico, aunque no hay que descartar aún a su compañero en el filial. Ni uno ni otro por cierto participaron en la sesión de ayer del primer equipo, ya que habían jugado con el filial en el fin de semana y Víctor, para el primer entrenamiento tras un partido, solo recurre a futbolistas del segundo equipo que no hayan jugado. Tanto uno como otro disputaron los 90 minutos ante el Teruel. A partir de mañana, en la vuelta al trabajo del primer equipo en la Ciudad Deportiva, el técnico empezará a mostrar sus intenciones para la cita del domingo (12.00).

Lo que se pudo ver ayer es que Paglialunga participó con normalidad en la sesión con los suplentes y ya está recuperado de la microrrotura de fibras en el peroneo que sufrió hace dos semanas. Aun así, ha contado muy poco para Víctor hasta ahora. Barkero, baja en Girona por una elongación, debe ejercitarse mañana o el jueves ya con el resto. Ayer trabajó al margen, pero apunta a estar disponible.