Sí, es verdad. José María Movilla y Javi Moreno serán hoy, si Dios quiere y la autoridad y el tiempo (el meteorológico) lo permiten, nuevos jugadores del Real Zaragoza. Después de una de las negociaciones más largas y con más dobleces de la historia del fútbol, ayer se cerró de forma oficiosa el acuerdo entre todas las partes para que ambos futbolistas sean, a partir de hoy, integrantes del conjunto aragonés. El último obstáculo que restaba para que la operación tuviera un final feliz era que el delantero resolviera el pago de la deuda que el club rojiblanco tiene con él, en total seis millones de euros. Javi Moreno dijo a este diario que no perderá ni un euro, y que le gustaría participar en el partido que el equipo de Víctor Muñoz disputará el sábado frente al Bolton, cuadro en el que estuvo la temporada pasada en calidad de cedido. Para que su nueva cesión, en este caso al Real Zaragoza, sea una realidad, su abogado viajará desde Ibiza a Madrid para repasar los papeles en el que, se supone, será el último formalismo si el letrado lo considera oportuno.

La negativa del Atlético a pagar la totalidad de su deuda con el delantero supuso un férreo bloqueo que impedía no sólo la llegada de Javi Moreno, sino también la de Movilla, ya que el Real Zaragoza había impuesto esa condición: o los dos o ninguno. No obstante, ayer, ante la fuerza del pulso que mantenían desde el Calderón y acuciado por la necesidad, el club que preside Alfonso Soláns desató el nudo que había formado al tratar de hacerse con los dos jugadores por el mismo precio y se aseguró a Movilla con independencia de lo que ocurriera con Javi Moreno. El centrocampista, aunque se diera el caso de que su compañero no viniera al Zaragoza por cualquier circunstancia de última hora, viaja por libre en la negociación. Es decir que El Pelado volverá a La Romareda en cuanto estampe su firma en el contrato que le unirá al conjunto aragonés durante las cuatro próximas temporadas a razón de 5,5 millones de euros, incentivos incluidos, por el total de ese periodo.

EN MADRID Jerónimo Suárez, director general del Real Zaragoza, viajará hoy mismo a Madrid para solventar el fichaje de uno y el préstamo del otro, por lo que deberá entregar al Atlético unos 1,5 millones de euros. Movilla llegará en propiedad, lógicamente, pero Javi Moreno tendrá que estar un año cedido con sueldo compartido por ambas entidades. El Real Zaragoza desembolsará 1,1 millones de euros de los 2,5 que cobra el goleador por campaña y se asegurará una cláusula preferencial para poder hacerse con sus servicios en el futuro sin traspaso alguno de por medio.

La firma de los compromisos contractuales con los futbolistas tendrá lugar a lo largo del día del hoy, por lo que es que probable que, conocida la celeridad con que se están gestionando estas contrataciones, el club aragonés no pueda presentarlos de inmediato en Zaragoza. Además, Víctor Muñoz ya ha comentado en repetidas ocasiones que desea contar con los dos cuanto antes, si es posible en la gira que están realizando por Inglaterra. A lo largo de la jornada se irá desvelando si José María Movilla y Javi Moreno toman destino a la capital aragonesa o cogen un vuelo para Londres. A la espera de esa decisión ya intrascendente, lo seguro es que la pareja vestirá mañana la camiseta del Real Zaragoza en la calle Luis Bermejo (en la elegante y coqueta sala de presentaciones que acoge La Romareda) o en Manchester.

El final de esta enrevesada historia de capítulos interminables y agotadores está a punto de producirse (obligado cruzar los dedos). Movilla y Javi Moreno, de verdad de la buena, serán hoy zaragocistas.