El Real Zaragoza ha realizado el ensayo soñado en El Toralín para aclimatarse a la Segunda Divisisón B, que se convierte en su actual destino si no no pone remedio después de la dolorosa, humillante e injustificable derrota sufrida frente a una Ponferradina arrolladora por méritos propios y, sobre todo, por defectos del conjunto de Paco Herrera. Es tal la decrepitud deportiva que la clasificación empieza a dejar de mentir: el Real Zaragoza está a dos puntos de los puestos de descenso después de siete jornadas consecutivas sin conocer la victoria. La caída libre y la crisis que perfora a la institución auguran lo peor. Paco Herrrea, mientras tanto, pelea por mantenerse en el cargo con su ya insostenible discurso de justificaciones y rosario de lamentaciones. Hoy ha dicho que está seguro de que con tres triunfos el equipo se salvará...

En Ponferrada, al margen del marcador, que ya de por sí echa lejía sobre el presente y el futuro zaragocista, el equipo aragonés se ha despedido esta temporada de sus remotas aspiraciones de ascenso antes de afrontar este encuentro. Ni directo ni indirecto. Subir a Primera con una derrota de estas características de por medio desmonta al más optimista, al más ingenuo. De ambos quedan pocos o ninguno salvo, quizás, el entrenador catalán. Solo el empate de Arzo, una rápida reacción al gol de Yuri tras asistencia de Acevedo, mostró a un grupo que parecía buscar los tres puntos. El tanto del central y un par de intervenciones de Santamaría, una a lanzamiento de Rico, amagó con un partido al menos equilibrado.

Los espejismos sacuden al Real Zaragoza como olas gigantes. Primero se destruye él con una concesión como la de Acevedo a los dos minutos de juego, un error en el pase que Yuri no perdonó, y después de igualar el encuentro, desnuda su insoportable levedad jerárquica, mostrándose como un grupo asequible para cualquiera, dirigido por Acevedo y Paglialunga, un par de futbolistas con dos velocidades en el motor y medio litro de gasolina física. Si además Montañés se pierde en el bosque, Luis García se sube a las ramas y Cidoncha juega a la peonza, el centro del campo agoniza frente a la energía del rival.

No sólo fue un problema de falta de médula espinal, sino también de columna defensiva. Yuri, un delantero poderoso y aguerrido, trituró a Arzo y a Álvaro. Los trató muy mal en la zancada y en el cuerpo a cuerpo y, al fnal, resultó ser el gran referente de la Ponferradina para llevar el encuentro donde más le convenía, a los pies del goleador como pirncpio y fin del contragolpe. Una prmera parte de intercambio de golpes dio paso a una segunda terminal para el Real Zaragoza, incapaz de dar un pase correcto, de saber qué dirección tomar.

Ese cúmulo de dudas y la profundidad de la Ponferadina le mataron con puñaladas certeras y con errores de cálculo impropios de alguien que dice jugar en Segunda. En dos minutos, Jonathan y Marquitos acabaron con el Real Zaragoza, que se ayudó de la rebelde genética de Esnáider para acortar distancias. Sin fuste, con Acevedo lesionado y Paglialunga de director de orquesta con mal oído y peor pie, llegó el cuarto, una obra maestra del contraataque rubricada por Yuri, la estrella de la sesión matinal. La Ponferradina confirmó su superioridad, su ambición, su fuerza... El Real Zaragoza se entrenó para Segunda B, que es donde le conducen Herrera, los jugadores y ese gran gestor que es García Pitarch.

Ficha técnica:

4.- Ponferradina: Santamaría; Ramírez, Alberto Aguilar, Samuel, Bellvís; Jonathan, Juande; Marquitos (Dieguito, min. 82), Acorán (Cristian, min. 92), Javi Lara; y Yuri (Berrocal, min. 87).

2.- Zaragoza: Leo Franco; Cortés (Fernández, min. 77), Álvaro, Arzo, Rico; Acevedo (Esnaider, min. 69), Paglialunga; Cidoncha, Luis García, Montañés (Javi Álamo, min. 58), y Roger.

Goles: 1-0 (min. 2): Yuri. 1-1 (min. 7): Arzo. 2-1 (min. 62): Jonathan. 3-1 (min. 72): Marquitos. 3-2 (min. 74): Esnaider. 4-2 (min. 84): Yuri.

Árbitro: Trujillo Suárez (Comité Tinerfeño). Mostró tarjetas amarillas a Yuri y Santamaría por la Ponferradina; y a Arzo por el Zaragoza.

Incidencias: Partido correspondiente a la jornada número 30 de la Liga Adelante. Unos 5.500 espectadores en El Toralín.