El plan se está cumpliendo al detalle. Al menos, así lo asegura Simone Grippo, que el pasado sábado se reencontró con el balón nueve meses después de aquella maldia tarde en La Romareda frente al Granada. Como estaba previsto, el suizo duró 45 minutos en el campo. Como se había planeado, una bolsa de hielo cubría después su rodilla derecha en el banquillo. No hubo sustos ni contratiempos. Todo en orden. «Jugar en Tarragona fue un paso importante, pero aún queda mucho trabajo por delante. Estoy en los tiempos previstos después de la operación», aseguró ayer el suizo en su reencuentro con la sala de prensa.

Tras el paso por el quirófano, los médicos establecieron su vuelta entre los seis y los nueve meses «aunque los nuevos estudios dicen que mejor nueve que seis», matizó el jugador, que advierte de que «necesito minutos para coger ritmo y más confianza y espero alcanzar el mejor rendimiento posible cuando empiece la Liga».

En este sentido, Grippo renuncia a asegurar su presencia en el primer partido de la competición, el día 17 ante el Tenerife. No quiere riesgos ni acelerones imprevistos. Todo a su tiempo. «Lo hemos planificado todo muy bien y hasta ahora el plan se está cumpliendo y está funcionando muy bien», insistió el central, que, eso sí, extrae una lectura muy positiva de su participación ante el Nástic. «Me olvidé de la rodilla y eso es una buena señal. Ahora se trata de ir cogiendo minutos».

En Tarragona, Grippo compartió zona con Atienza, «un muy buen jugador con experiencia y personalidad. Habla mucho en el campo y me gusta que haya comunicación», sostiene.

En todo caso, el suizo confía en que la próxima temporada no tenga nada que ver con la pasada. Ni en el plano personal ni en el colectivo. «Es importante que vuelva la ilusión, pero lo más relevante es que la gente tiene ganas de que esto cambie. Los nuevos quieren ganar y eso nos hace mejores», afirma el suizo, que anuncia cierto cambio en la forma de jugar del equipo a partir de ahora. «El fútbol que vamos a jugar va a ser más intenso, con más profundidad y mucho más adapatado a la competición para estar arriba». La medida responde, en su opinión, a seguir el patrón marcado por equipos como Osasuna o Granada, que lograron el ascenso directo la pasada campaña. «Si practicas bien ese fútbol, ganas. Se trata de dominar las dos áreas y así lo hizo, por ejemplo, Osasuna. Ese fútbol va a triunfar y ahora nos toca a nosotros ponerlo en marcha en el campo. Cuesta tiempo pero lo haremos», asevera.