Guitián echa el cerrojo. El central cántabro, después de un comienzo de temporada complicado por la operación de apendicitis, está atravesando su mejor momento personal del curso, posee cada vez con más confianza y está siendo uno de los artífices de que el Real Zaragoza sea, actualmente, el conjunto menos goleado de Segunda, un dato que no es baladí a tenor de los antecedentes grupales en campañas anteriores.

El cántabro, tras la derrota en Huesca, no jugó frente al Sporting de Gijón en la jornada inaugural del 2020 al estar sancionado, pero ha sido un fijo en los cuatro siguientes duelos con solo un tanto recibido y de penalti. Cierto es que en los dos últimos duelos no sirvió esa fortaleza atrás para vencer, pero el central extrae conclusiones positivas: “Si hay que sacar cosas buenas de estos partidos una de ellas es la solvencia defensiva”, afirmó después de mostrarse “contento” por las porterías a cero y de desear “que sigamos así juntitos, como un equipo”.

Al equipo, además, le ha sentado bien el mercado de invierno, al menos en la parcela que afecta a Guitián. En su puesto llegó El Yamiq y “tuvo que salir Simone (Grippo) en busca de minutos”, y el zaguero marroquí “ha caído bien” dentro del equipo, pero lo primordial es que los cuatro centrales “nos complementamos bien y eso es bueno para el equipo”. Y un bendito problema para Víctor Fernández.

El técnico también insiste con asiduidad en que hay que mantener la unión del grupo, por eso había que extremar las precauciones. En ese aspecto, para Guitián, misión cumplida: “Ha quedado intacta la palabra equipo y también la unión del vestuario. Se ha ido gente importante que hacía mucho por el grupo, pero los que han venido están sumando ya y los que estábamos, a apretar más el culo y echar una mano”, subrayó.

En el plano más deportivo, echó una mirada al pasado y al futuro más inmediato. Recordó que “el equipo ha estado siempre más cerca de ganar que de perder, sobre todo en casa ante el Fuenlabrada, aunque en Cádiz nos quedamos con la miel en los labios”, y aseguró que el duelo contra los madrileños “se atascó” porque fue uno de esos adversarios que “vienen a proponer poco y es difícil sacar ocasiones de un equipo que se mete atrás”. De hecho, confesó que el colegiado, Ávalos Barrera, “estaba bastante enfadado con la actitud que habían tenido los jugadores del Fuenlabrada y el tiempo que habían perdido”, si bien el cántabro abogó por “medir todo ello de otra manera porque se les permitió demasiado”.

Y en cuanto al Elche, próxima parada del conjunto aragonés, resaltó que “somos uno de los mejores visitantes de la categoría y queremos continuar con esa dinámica”, aunque el equipo ilicitano “es durísimo y juega muy bien al fútbol”. “Tiene muchos registros, muchos jugadores de uno contra uno por banda y arriba se ha reforzado bien a pesar de la salida de Qasmi. Ha hecho muy buen trabajo en el mercado de invierno. Ya nos complicó en casa y sabemos que habrá ratos en los que lo pasaremos mal, por lo que hay que intentar aprovechar nuestras ocasiones y dejar la portería a cero”, concluyó.