Alberto Benito será sometido en las próximas horas a una resonancia magnética para ver la lesión muscular que sufrió en el recto anterior izquierdo, en la zona del cuádriceps, en el partido contra el Elche. Se trata de la sexta lesión que le ha hecho ser baja para algún partido desde que el lateral catalán fichó por el Real Zaragoza en el verano del 2017, cuatro de ellas, como la sufrida el sábado, musculares. Si solo es una contractura, apunta a ser baja para el duelo en Mallorca el lunes 25, mientras que si hubiera una rotura de fibras, que es el temor que hay en el club, su ausencia se prolongaría entre tres o cuatro semanas, ya que el cuádrices es una zona delicada en el futbolista, al ser la de golpeo.

Llegó Alberto Benito al Zaragoza de la mano de Natxo González, que lo había tenido en el Reus y fue indiscutible desde el principio, pero no tardó en recibir el primer revés, ya que se lesionó a finales de septiembre, en la sexta jornada, frente al Nástic. Sufrió antes del descanso una rotura de fibras en el gemelo izquierdo que le tuvo seis jornadas fuera del equipo, para volver en El Alcoraz ante el Huesca y sufrir un esguince en el tobillo derecho, que le dejó después otras dos jornadas más en el dique seco.

La segunda vuelta del curso pasado fue su mejor periodo de continuidad sin molestias en el equipo y solo se perdió por lesión el choque ante el Cádiz, por un leve esguince en la rodilla izquierda, del que se recuperó en menor tiempo del esperado.

Ya en la temporada actual, Benito empezó la Liga gozando de continuidad, salvo su baja ante el Nástic por la expulsión ante el Granada, pero en Riazor, en el último partido de Lucas Alcaraz, sufrió una rotura de fibras en el cuádriceps izquierdo, en la misma zona que tiene lesionada ahora, aunque el parón navideño minimizó la baja y solo estuvo fuera ante el Extremadura, antes de las vacaciones, y frente al Sporting, en el primer partido de 2019, aunque en ese duelo estuvo en el banquillo y Víctor prefirió no arriesgar.

Una contractura en el aductor le dejó fuera en los duelos ante el Oviedo y Las Palmas a finales de enero y principios de febrero, mientras que en el tramo final del choque ante el Albacete en La Romareda se tuvo que retirar aquejado de calambres, aunque ahí no hubo lesión, algo que sí sucedió el pasado sábado.

Benito notó la molestia al principio del encuentro ante el Elche, intentó seguir pero tras diez minutos sobre el césped pidió el cambio y se marcho cabizbajo para ser sustituido por Delmás, su habitual relevo en estas dos temporadas y que será también su sustituto ante el Mallorca si las pruebas confirman la lesión del lateral catalán.