En el escrito de la Fiscalía se explica cómo se justificó desde el Real Zaragoza el pago del presunto amaño del partido a través de los ingresos que dio orden Agapito Iglesias para realizar desde la cuenta del club a nueve jugadores (Lanzaro, Ander Herrera, Doblas, Paulo da Silva, Braulio, Gabi, Ponzio, Jorge López y Diogo), además de al técnico, Javier Aguirre, y al director deportivo, Antonio Prieto. Esos ingresos, para un total de 965.000 euros, fueron extraídos por ellos de sus cuentas con posterioridad y presuntamente entregados a los jugadores del Levante, mientras que el club, que el 13 de junio entró en concurso de acreedores, justificó esa salida de dinero con el pago de primas de esa temporada por lograr la salvación.

Se trataba de dos ingresos, con fechas del 17 y del 19, teniendo en cuenta que el partido se jugó en el Ciudad de Valencia el día 21. Lanzaro, Ander, Doblas, Braulio, Da Silva y Jorge López recibieron presuntamente esos ingresos de 50.000 y de 40.000 euros cada uno, mientras que los de Diogo, Gabi, Ponzio, Aguirre y Prieto fueron de 50.000 y 35.000 euros. «Para satisfacer el pago del soborno, los días 19 y 20 de mayo los acusados (...) extrajeron en efectivo de sus cuentas las cantidades recibidas del Real Zaragoza, salvo el director deportivo y una parte de la cantidad entregada a Diogo, los cuales disponían de metálico en su domicilio, y las entregaron a los jugadores del Levante», asegura la Fiscalía en su escrito de acusación. En él, también se explica que tres transferencias de Real Zaragoza Real State, sociedad filial de la SAD, fueron las que cubrieron las cantidades entregadas desde el club aragonés a los jugadores.

Las nóminas

Tras la declaración del concurso de acreedores en junio de ese año, el Real Zaragoza, «para justificar ante la administración concursal la salida de dinero en efectivo, los acusados Agapito Iglesias, Javier Porquera, y Francisco José Checa acordaron confeccionar el día 19 de septiembre del 2011 las nóminas correspondientes a los pagos efectuados telemáticamente por el acusado Javier Porquera que ascendieron a 965.000 euros y que justificaron documentalmente con el concepto ‘P. Extra: P. Extra 5’ para los jugadores y el entrenador y con ‘P. Extra: P. Ext.7’ para el director deportivo», señala el escrito de la acusación, donde también se reitera que el club blanquillo carecía de cualquier programa de gestión u organización que evitase y previniese comportamientos delictivos desde las oficinas de la entidad y permitía la salida de dinero en efectivo de importantes cantidades.

«El Real Zaragoza ante la administración concursal indicó de forma mendaz que las cantidades reflejadas en dichas nóminas se correspondían con el concepto de primas por haber logrado la permanencia. Dichos pagos no tienen nada que ver con el resto de primas abonadas a los jugadores durante el año como ‘P.Extra: P. Ext.8’». Así, a los nueve futbolistas antes citados se les justificaba el ingreso de la cantidad que presuntamente había ido a parar a los futbolistas del Levante junto a las primas por la permanencia, igual que al entrenador Javier Aguirre. Con Antonio Prieto se justificaron los 85.000 euros como «retribución variable de su contrato».

Falta de comprobación

En el resto de jugadores de la plantilla (Lafita, Paredes, Jarosik, Contini, Edmilson, Marco Pérez, Leo Franco, Bertolo, Pinter, Sinama Pongolle, Boutahar, N’Daw, Uche y Obradovic) en las nóminas de ese 19 de septiembre «solo se recoge la prima percibida reflejada en el escrito firmado por el capitán Gabriel Fernández Arenas de fecha 23 de mayo del 2011» y que suponen un total de 765.000 euros, la cifra acordada como premio por la salvación para la plantilla (727.120 euros) y para el entrenador (37.880).

«Las nóminas confeccionadas el 19 de septiembre del 2011 sirvieron como justificante ante la administración concursal y el juzgado de lo mercantil del destino de dicho dinero, dado que los administradores concursales dieron por válidas las mismas sin comprobar si efectivamente los conceptos realizados respondían a la realidad», añade el escrito de la acusación de la Fiscalía sobre la forma en la que las cantidades se justificaron en el Real Zaragoza desde el punto de vista contable.